A lo largo de la historia se ha visto como grandes hombres y mujeres han trabajado incansablemente a fin de prosperar y conseguir sus objetivos.

Para todos ellos, los problemas que han surgido en sus proyectos han sido a causa del entorno.

En el entorno de todo emprendedor siempre que hay que tener en cuenta tres ámbitos: familia, amigos y personal de trabajo.Hoy quiero destacar en particular los problemas que surgen con el personal de trabajo y espero que les sirvan de orientación para sus propios proyectos.

Dentro del entorno de trabajo se encontrará a su vez con dos conflictos: relación con subordinados y relación con superiores.

Probablemente, el mayor problema será con sus subordinados. No cabe duda que en todo ambiente de trabajo, usted podrá tratar con subordinados que serán fieles y encantadores pero también los habrá que sean lobos con piel de cordero así como demonios sin máscara.

En mi opinión, los demonios sin máscara son preferibles porque suelen exponer sus inquietudes y preocupaciones directamente, con lo cual la solución será tratar de domarlos como si de animales salvajes se tratase. En ocasiones con saciar su vanidad con algún cumplido será suficiente, eso sí, sin excederse porque sino se creerán iguales o superiores a usted y en ese caso estará usted perdido.

En lo que atañe a los lobos con piel de cordero, suelen ser difíciles de identificar, por lo que mi recomendación es directamente marcar distancias con el personal, aunque siendo cercano a la vez.

Con sus superiores, si es usted una persona que destaca, el principal problema vendrá del miedo a ser desplazados. Asimismo el miedo se agravará con los comentarios que puedan hacer los subordinados a sus superiores a fin de enervarlos y agravar el malestar. Para tratar con los superiores que traten de frenar su potencial, la solución es fácil: una dosis de cal y otra de arena. Que sepan que usted les respeta pero a su vez usted es capaz de volar por sí mismo y, seguramente, sin la necesidad de sus personas.

Puede que estos consejos no le eximan de una larga tortura en su ambiente de trabajo. Si usted aprecia que así es, puede tomar dos opciones: cambiar de trabajo o aguantar como tantos otros hemos hecho en múltiples ocasiones.

Manuel Freire-Garabal y Núñez