La fiscal Ángeles Garrido ha defendido ante el Supremo que el exduque de Palma Iñaki Urdangarin y su exsocio Diego Torres fueron los "instigadores" de la corrupción en los funcionarios de Baleares y también se concertaron con empleados públicos en la Comunidad Valenciana para conseguir convenios.En su defensa del recurso contra la sentencia del caso Nóos, en el que pide que se aumente la pena de Urdangarin de 6 años y 3 meses a 10 años, la fiscal ha explicado que ambos fueron el "motor" de los delitos que se juzgaron y, en el caso de la corrupción a funcionarios de Mallorca, ha destacado la "reprochabilidad" de su conducta.