EFE | Las plantas de Alcoa en A Coruña y Avilés (Asturias) no podrán
presentarse a la subastas de interrumpibilidad para el segundo semestre
del año, al haber renunciado a prestarlo en el año en el que le fue
asignado, ha dicho el director general de Operación de REE, Miguel
Duvison.
Duvison, en una rueda de prensa celebrada este jueves previa a la
Junta de Accionistas de mañana, ha señalado que, cuando un proveedor del
servicio renuncia a prestarlo en el año en que le fue asignado no puede
presentarse a la subasta siguiente, con lo cual las factorías de Alcoa
que han renunciado a la prestación durante el primer semestre de este
año no podrán hacerlo.
Alcoa se adjudicó 400 megavatios (MW) de los 2.600 MW en la subasta
de interrumpibilidad para prestar el servicio en el primer semestre del
año, que fue celebrada en diciembre. Según Duvison, el cese de actividad en las factorías de Alcoa de A
Coruña y Avilés, que tienen un impacto del 0,6 % en la demanda eléctrica
en España, llevará a que en 2019 el consumo sea plano o incluso por
debajo del de 2018.
Duvison ha indicado que, de no producirse un incremento de actividad,
el cese de esas dos factorías puede llevar a que el moderado
crecimiento, del 0,4 %, que hubo en 2018 sea incluso inferior. Respecto a la introducción de cambios en las subastas de
interrumpibilidad, que convoca el Gobierno y organiza REE, Duvison ha
dicho que no hay tiempo de aquí a la próxima puja, que tendrá lugar en
junio, para que se introduzcan cambios drásticos en la metodología,
aunque exista voluntad a futuro.
En este sentido, ha dicho que las subastas evolucionarán para ser un
mecanismo más eficaz y menos costoso, pero de aquí a junio no hay tiempo
para que eso se produzca. En cuanto a que las subastas de interrumpibilidad se hayan saldado
con precios menores a las precedentes, el director general de Operación
de REE ha manifestado que si el precio es inferior, es por voluntad de
los oferentes, ya que los precios son resultado de las ofertas que
presentan las industrias, pues el mecanismo no fija el precio.
Respecto al proyecto de real decreto del Estatuto para Consumidores
Electrointensivos, ha manifestado que supone un paso, una precisión de
instrumentos que pueden ayudar a las grandes industrias. Con relación al impacto en la seguridad del suministro de la salida
del sistema de la generación con carbón, ha manifestado que hay tiempo
más que suficiente hasta 2030, horizonte del Plan Nacional Integrado de
Energía y Clima (PNIEC) y fecha en la que se prevé que el 74 % de la
generación sea renovable, para "hacer las cosas de manera razonable" y
compatible con la seguridad del suministro.
Duvison ha querido transmitir un "mensaje de tranquilidad" porque la
salida de tecnologías siempre se ha hecho de forma acompasada con la
entrada de otras. Con relación al impacto que puede tener en determinadas zonas de
España, como Asturias, donde hay una mayor concentración de plantas
térmicas, Duvison ha reconocido que "en la zona asturiana hay algunos
grupos notablemente importantes desde el punto de vista de la seguridad
del suministro" y algunos puntos de la red requerirán allí refuerzos
para que se compatible el cierre del carbón con la seguridad del
suministro.
También se ha referido a la demanda de acceso solicitada para
proyectos eólicos, que ha dicho que es de más del 80 % que el
contingente de potencial eólico previsto para 2030, pero no todo llegará
a ser un proyecto industrial implantado, por lo que el Gobierno "está
trabajando para diferenciar el grano de la paja" y "si representa un
interés finalista de producir megavatios, salga adelante".