EFE | Las
más de 3.000 gasolineras de Portugal han recuperado la normalidad en
las últimas horas, tras la huelga de transportistas de combustibles que
comenzó el pasado lunes y que fue desconvocada ayer.
La
restricción de repostar un máximo de 15 litros también fue levantada
ayer jueves, aunque muchas gasolineras esperan la llegada de los
camiones para llenar sus tanques de combustible, ya que estuvieron
desabastecidas desde el pasado lunes. Los transportistas de mercancías peligrosas, convocantes
de la huelga, exigían al Gobierno luso que se creara una categoría
profesional específica para estos trabajadores y mejorar así sus
condiciones salariales.
En las zonas fronterizas
españolas, las gasolineras han notado de forma drástica el incremento de
ventas, ya que "desde el lunes ha habido colas permanentes" de
vehículos que iban en dirección a Portugal, aseguró hoy a Efe José
Tercero, responsable de las gasolineras "La Pedresina" del área
fronteriza de Fuentes de Oñoro (Salamanca). "Hemos trabajado el doble y lo hemos notado mucho", insistió el empresario.
Tanto
portugueses que viven cerca de la frontera como turistas que acudían a
Portugal "llenaban el deposito al máximo" en territorio español por
miedo a verse sorprendidos por la huelga, argumentó José Tercero.Durante
los días de huelga, el Gobierno del socialista António Costa estableció
servicios mínimos, entre los que se incluía un abastecimiento normal
para hospitales, bases aéreas, bomberos, puertos y aeropuertos y un 40 %
en las gasolineras.
El paro también afectó a los
aeropuertos de Lisboa y Faro (sur) y llevó a más de 30 aviones
portugueses a parar en el aeropuerto español de Sevilla para cargar
combustible. El ministro de Infraestructuras luso,
Pedro Nuno Santos, anunció en una declaración a la prensa en Lisboa que
la normalización "será gradual", después del acuerdo alcanzado entre el
Sindicato Nacional de Transportistas de Materias Peligrosas de Portugal y
la patronal Asociación Nacional de Transportadores Viales de Mercancías
(Antram).