EFE | La
intervención militar en Venezuela es una opción que sigue presente
entre la oposición al Gobierno de Nicolás Maduro, porque es una
alternativa legal que contempla la Constitución, explicó ayer en
una entrevista exclusiva con EFE el líder del partido Voluntad Popular
Leopoldo López.
"Nosotros no descartamos ningún escenario que esté
dentro de la Constitución y la Constitución prevé que esa es una
posibilidad. Espero que no tengamos que llegar a ese punto, pero no lo
descartamos, porque es constitucional, porque la libertad es la
condición para todo lo demás", señaló López.
Para el líder opositor, quien
permaneció bajo arresto domiciliario hasta que fue liberado por un grupo
de militares y funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia
(Sebin) el pasado martes, no se van a solucionar los problemas del país
hasta que se "conquiste la libertad". "Y
seremos los venezolanos que lograremos el cese a la usurpación. Hay que
agradecer y reconocer al apoyo que hemos recibido de la comunidad
internacional.
El presidente Juan Guaidó ha sido reconocido por 58
países. No ha habido una coalición internacional a favor de una causa de
liberación con tanto apoyo internacional desde la segunda guerra
mundial", señaló. López aseguró que "no hay nada que
impida utilizar las herramientas legales constitucionales para intentar
lograr la libertad, porque la libertad en Venezuela se mide con
muertes", porque "cada día que pasa es un día en el que mueren niños por
desnutrición, personas en hospitales, por la inseguridad".
Acerca del apoyo con el que cuenta la oposición entre los militares, subrayó que gran parte de los uniformados de la Fuerza Armada están al lado de la causa opositora. Consideró
que la barrera más importante a derribar en estos momento era "el
miedo", que cree, comenzó a caer el pasado martes cuando lideró un levantamiento militar junto a Juan Guaidó, reconocido por medio centenar de países como presidente interino. "Ahora, ¿qué tenemos que derribar? El miedo. ¿Qué comenzó el 30 de abril? Comenzamos
a derrumbar de una manera contundente el temor de los hombres y mujeres
de la Fuerza Armada para que tomen las decisiones de actuar", agregó López.
El
opositor, quien aseguró que "se dieron varias conversaciones" con
miembros destacados del chavismo, cuyos nombres no facilitó, manifestó
que Maduro está rodeado por personas en su "entorno más íntimo" que
quieren que "salga del poder". Pese
a no descartar una intervención militar internacional, insistió que
"tiene que ser un proceso pacífico que no recurra a la violencia pero
tiene que contar con la fuerza del pueblo y de los militares".
Preguntado
por el levantamiento del pasado martes, explicó que lo concibe como "un
día en que había que mandar un mensaje contundente, claro, de adhesión
de funcionarios activos con capacidad de ejecutar acciones". Ese
día, Guaidó y López, horas después de ser liberado, lideraron un
levantamiento militar que tenía como objetivo desencadenar un movimiento
en los cuarteles para derrocar a Maduro, que, pese a que no tuvo gran
eco entre los uniformados, multiplicó los rumores acerca de la lealtad
al mandatario.
"Hoy Maduro no puede confiar ni en quien le sirve el café. Él sabe que su propio entorno quiere que él salga,
sabe que su propio entorno está en conversaciones con nosotros en todos
los niveles, y él sabe que tiene que simular que tiene control",
reiteró. En opinión de López, "el quiebre" del Gobierno de Maduro "va a continuar", así como la presión internacional.
Y
esos dos elementos, junto a la presión popular, "van a continuar en
simultáneo apuntalando cuando llegue el momento en el que se pueda ya
cesar la usurpación".
López
fue detenido en 2014 y sentenciado a 14 años de cárcel, acusado de
liderar los actos violentos en las marchas antigubernamentales que se
llevaron a cabo ese año. El
opositor cumplió su condena durante casi tres años en una cárcel militar
y el resto mantuvo arresto domiciliario hasta su liberación el pasado
martes.