EFE | El
ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, declaró hoy
que la prórroga del tratado de reducción de armas nucleares, Nuevo START
o START III, que expira en 2021, será uno de los temas centrales mañana
en su reunión con su homólogo estadounidense, Mike Pompeo. "Mike Pompeo estará mañana aquí. Considero que este será uno de los
temas centrales de nuestras conversaciones", dijo durante una
conferencia de prensa en Sochi junto a su homólogo chino, Wang Yi.
Lavrov recordó que Rusia "se ha expresado a favor de
prorrogarlo por un plazo de cinco años después de que este Tratado
caduque en 2021" y sigue dispuesto a debatir el tema con los
estadounidenses. Según el titular de Exteriores, es
necesario utilizar los mecanismos de control bilateral de este
importante tratado para "dar solución a las inquietudes que surgen
respecto a diversos aspectos de la reducción (de las armas nucleares) a
las cifras acordadas".
Lavrov indicó que Rusia tiene
inquietudes respecto al reequipamiento de las lanzaderas de muchos
submarinos estadounidenses y bombarderos estratégicos "a una
configuración no nuclear". Según el ministro, se
trata de algo que el Tratado establece, pero esto "debe realizarse de
tal modo que la otra parte tenga la posibilidad de convencerse al 100 %
de que es imposible el retorno de estas lanzaderas y bombarderos a una
configuración nuclear".
El jefe de la diplomacia rusa
indicó que es un tema que se debate, pero hasta el momento no se ha
"logrado establecer una fórmula que nos permita verificar que todo se
realice en correspondencia con el Tratado". Por su
parte, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, afirmó que Pekin espera
que Estados Unidos "retorne al marco del Tratado INF" de eliminación de
misiles de mediano y corto alcance y "suscriba la prórroga del Nuevo
START".
Además, reiteró que su país "no considera
necesario sumarse a las conversaciones entre Rusia y EEUU sobre desarme
nuclear porque el arsenal nuclear de China se mantiene constantemente en
el mínimo". En la actualidad, el Nuevo START es el
último pacto importante sobre control de armas firmado entre Estados
Unidos y Rusia que se mantiene vigente.
El acuerdo,
rubricado en 2010 por los entonces presidentes de EEUU y Rusia, Barack
Obama y Dmitri Medvédev, reduce en un 30 % el número de cabezas
nucleares, hasta 1.550 por país, y limita a 800 el número de vectores
para su lanzamiento. Asimismo, limita para cada
parte a 700 el número de misiles balísticos intercontinentales, misiles
balísticos estratégicos en submarinos y aviones bombarderos estratégicos
equipados con armamento nuclear. Pese a que pueda
ser prolongado por cinco años más, la salida de EEUU y de Rusia del
tratado INF pone en duda el futuro de Nuevo START.