EFE | El
Hospital de Bellvitge, de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), ha
implantado su primer corazón artificial total a un hombre joven al que
le fallaban los dos ventrículos y tenía hipertensión pulmonar, lo que
hacía imposible un trasplante cardíaco inmediato.
El paciente fue intervenido el pasado día 27 de mayo y desde entonces
continúa estable en la unidad de cuidados intensivos, a la espera de que
se normalice su hipertensión arterial pulmonar y pueda estar en
disposición de recibir un trasplante de corazón en los próximos meses. Los cirujanos retiraron los dos ventrículos del corazón de este joven,
dejando intactas las aurículas, la aorta y la arteria pulmonar, e
implantaron las conexiones para el corazón artificial y el nuevo
dispositivo, que incluye dos ventrículos que sustituyen a los
extirpados.
El sistema implantado se conecta mediante dos tubos, que salen del
cuerpo del paciente por debajo de las costillas hacia una consola
portátil externa. Esta consola genera unos impulsos que se transmiten
por un sistema de aire y vacío a los ventrículos artificiales, que
activan el mecanismo de bombeo de la sangre.
Los doctores Albert Miralles, jefe de cirugía cardíaca del Hospital
de Bellvitge, y Daniel Ortiz Berbel y José González Castelo han dado a
conocer este martes en rueda de prensa los detalles de esta intervención
quirúrgica de alta complejidad, la segunda que se desarrolla en España,
tras una primera en Navarra en 2016.
La situación del paciente de Bellvitge antes de la intervención era
muy delicada, ya que sufre una miocardiopatía de larga duración y su
pronóstico, a corto plazo, era el fallecimiento, han explicado los
doctores. “Es el peor de los escenarios, que fallen los dos ventrículos”
y que el paciente sufra hipertensión pulmonar, ha valorado el doctor
Miralles.
Por ello se tomó la decisión de implantar un corazón artificial
total, que “es un puente al trasplante” y era “la única alternativa que
había”, ha añadido. Ortiz ha precisado que el paciente está consciente y
en la UCI, donde ha iniciado ya un tratamiento de fisioterapia y
rehabilitación de toda la zona operada y se espera que su evolución siga
siendo positiva, aunque la operación ha sido de alta complejidad y “es
muy pronto”, ha dicho, para hacer valoraciones definitivas.
Este tipo de intervenciones no son muy habituales en España, donde el
sistema de trasplantes es público y los pacientes no deben esperar
mucho para un trasplante de corazón, pero en otros países, como Estados
Unidos, es más frecuente. En ese país, la implantación de asistencias
circulatorias en el corazón tienen un resultado positivo para casi el 70
% de las personas intervenidas, ha precisado.
El Hospital de Bellvitge fue el año 2007 el primero de España en
colocar un corazón artificial a una paciente para la que estaba
contraindicado el trasplante y, desde entonces, ha implantado un total
de 24 asistencias ventriculares mecánicas, el número más alto hecho en
España por un solo centro. En diez de estos casos, el paciente ha recibido más tarde un trasplante
de corazón con éxito y, en otros diez casos, el paciente está en su casa
con el dispositivo implantado a la espera de ser trasplantado, mientras
dos de los enfermos fallecieron.
En otros dos casos la implantación de
la asistencia ventricular se ha planteado como definitiva, uno de ellos
una mujer que lleva este dispositivo desde el 2015, ha precisado el
doctor Ortiz. Bellvitge también lidera el uso de asistencias circulatorias mecánicas
temporales (ECMO) para casos agudos de insuficiencia cardíaca, y en el
año 2018, colocó 56 asistencias, la cifra más alta de un hospital
español.