EFE | El
presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha llamado al independentismo
a retomar la iniciativa y a situarse en el camino de la "ruptura
democrática" para avanzar hacia la "república", en una nueva etapa que
estará marcada por la "confrontación" con el Estado.
"Empezamos una nueva etapa, y por eso pido que nos pongamos en marcha
todos otra vez. Quizá era imprescindible este período de reacción a la
defensiva, pero ahora ya lo tenemos que superar porque hemos aprendido
la lección. Tenemos un deber entre nosotros, la responsabilidad cívica y
democrática de volver a hacerlo", ha dicho en la Universitat Catalana
d'Estiu, en Prada de Conflent (Francia).
El 'president' ha definido esta nueva etapa del "procés" como la de la
"recuperación de la confianza" y ha fijado su inicio en la manifestación
independentista que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) ha convocado
para el próximo 11 de septiembre con motivo de la Diada. A partir de ese momento, ha continuado, los partidos
independentistas se deben centrar en concretar "un proyecto y una
estrategia" que lleve hacia la "república catalana", sabiendo de
antemano que deberán "arriesgar mucho" y "asumir sacrificios".
En este sentido, ha afirmado que para hacer valer la voluntad de "dos
millones de catalanes" debe considerarse "la desobediencia civil dentro
de un marco democrático" y "totalmente pacífica", ya que a su juicio es
"un deber" no acatar "las leyes injustas" para defender "los derechos
humanos". "Lo hemos intentado todo y lo seguiremos
intentando, porque no podemos dejar de intentar algo que forma parte de
nuestra condición de catalanes, la negociación y el pacto. Pero no nos
mintamos ni nos engañemos más a nosotros mismos: descartado un Gobierno
español que nos considere interlocutor para pactar un referéndum, solo
nos queda la confrontación democrática y pacífica", ha expuesto.
Para que esta nueva etapa pueda ser exitosa, Torra ha pedido a los
partidos independentistas que desistan de la "batalla" que mantienen
desde hace tiempo y que se ha recrudecido tras el reciente ciclo
electoral.
"Frenemos la batalla entre
independentistas. Ningún independentista puede ser el adversario de otro
independentista. Nuestros adversarios son quienes nos impiden ejercer
el derecho a la autodeterminación de Cataluña. Tenedlo claro, a mí no me
encontraréis en luchas partidistas ni en batallas estériles por
hegemonías políticas", ha exclamado.
El presidente
catalán, que en numerosas ocasiones se ha referido a la "unidad" del
independentismo, ha precisado que dicha unidad tiene que ir "supeditada
al objetivo central de la independencia", y ha sugerido que la "unidad
estratégica" debe ir acompañada de una "unidad formal" que se
materialice, si hace falta, en "listas unitarias".
Torra también ha disertado sobre cuál debe ser la respuesta del
independentismo ante una eventual sentencia condenatoria contra los
líderes del "procés". A su entender, un veredicto en este sentido
constituiría una "condena" para el Estado y una "oportunidad" para
Cataluña.
"Que sepa el Estado español que cada golpe
represivo nos fortalece", ha incidido el 'president', que ha tirado de
símil futbolista y ha reclamado: "No juguemos más a la defensiva, que es
como nos quiere el Estado español. Volvamos a recuperar el impulso".
En su intervención, Torra ha defendido que el referéndum del 1 de
octubre de 2017 fue "el momento fundacional de la república catalana" y
ha reiterado su compromiso de restituir al expresidente Carles
Puigdemont al frente de la Generalitat, aunque los partidos políticos
que respaldan al Govern hace tiempo que han abandonado esta pretensión,
por lo menos públicamente.
Con todo, ha resumido:
"Hagámoslo. Sepamos convertir entre todos esta nueva etapa en una ola de
vida y esperanza. Que este 11 de septiembre sea la línea de salida del
tramo final para conseguir la libertad. Volvamos a levantarnos y a mirar
adelante, solo adelante. Yo estoy dispuesto y estoy convencido que la
mayoría del pueblo también".