EFE | El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, adelantó hoy que se estudia
ampliar hasta final de año el estado de emergencia por el coronavirus,
que debe concluir el próximo 31 de julio. "Razonablemente se dan las condiciones para continuar la emergencia del
coronavirus más allá del 31 de julio", señaló Conte en declaraciones a
los periodistas.
El estado de emergencia "se necesita para mantener el virus bajo
control. Todavía no se ha decidido todo, pero razonablemente irá en
esta dirección", subrayó.
El jefe de Gobierno confirmaba así informaciones de prensa que
aseguraban que el Gobierno, por indicación del Comité científico técnico
que le asesora en esta crisis y del Ministerio de Salud, había decidido
extender la disposición, que expira el 31 de julio.
Italia declaró el estado de emergencia el 31 de enero tras
detectarse los primeros positivos con coronavirus, una pareja de
turistas chinos en Roma, y por un periodo de seis meses.
Con ello, el ejecutivo puede asignar fondos para la lucha contra
el virus y adoptar medidas por decreto, como el confinamiento y
restricciones al movimiento de las personas, entre otras.
Italia está en plena desescalada de estas restricciones, pero ya
han surgido focos en varias partes del país y el Gobierno subraya que
la clave es seguir un política de cautela.
Ayer jueves, el ministro de Sanidad, Roberto Speranza, firmó una
ordenanza para prohibir entrar al país a personas procedentes de trece
"países a riesgo" por la pandemia de coronavirus, entre ellos cinco
latinoamercanos: Chile, Perú, Brasil, Panamá y República Dominicana.
Además, Armenia, Bahrein, Bangladesh, Bosnia Herzegovina, Kuwait, Macedonia del Norte, Moldavia y Omán.
En concreto la ordenanza dispone "la prohibición de entrada o de
tránsito en Italia a las personas que en los últimos catorce días hayan
estado o pasado" por los mencionados países. Para garantizar esta disposición, quedan suspendidos los vuelos directos e indirectos desde y hacia estos estados.
"En el mundo la pandemia se encuentra en su fase más aguda y no
podemos perjudicar los sacrificios de los italianos en estos meses. Por
esa razón hemos elegido la línea de la máxima prudencia", avanzó el
ministro Speranza en un comunicado.
El pasado martes el Gobierno italiano ya suspendió los vuelos
procedentes de Bangladesh al registrar un aumento de los casos de
coronavirus importados desde ese país, especialmente en Roma.
Italia suma ya 242.363 contagios de coronavirus, de los cuáles
han muerto 34.926 personas desde que se confirmó el primer caso local el
21 de febrero en Lombardía (norte).