EFE | La
Seguridad Social ha puesto en marcha un protocolo de intercambio de
información con las comunidades autónomas para el traspaso de datos de
las solicitudes resueltas del ingreso mínimo vital (IMV) con el que
buscan facilitar la adaptación de las rentas autonómicas a la nueva
prestación.
Según un comunicado del Ministerio de Seguridad Social remitido este
lunes, en poco más de un mes se han recibido cerca de 600.000
solicitudes del IMV que, recuerdan, está configurado como una prestación
"suelo" y es compatible con las autonómicas por lo que cada comunidad
"puede modificar el modelo de su prestación como considere oportuno".
El protocolo, en funcionamiento desde el pasado 21 de julio, busca facilitar esa adaptación.
Actualmente, hay 300.000 hogares que reciben rentas de inserción
autonómicas y parte de ellas (las que cumplan los requisitos del IMV)
podrán encuadrarse en este programa estatal, añaden.
Junto a este protocolo de intercambio con las CCAA, se ha
llegado a acuerdos con una serie de ayuntamientos que aportarán
directamente la información referida al padrón municipal.
Ambos acuerdos, destacan, ayudan a facilitar la gestión de esta
prestación así como la coordinación con las distintas administraciones.
La Seguridad Social ya abonó de oficio a finales de junio un
primer pago del IMV a 74.119 hogares de toda España que el próximo 3 de
agosto recibirán la mensualidad de julio.
Junto a esos 74.119 hogares, también recibirán la prestación los
nuevos beneficiarios a los que se les haya reconocido -la Seguridad
Social no detalla aún esta cifra- con efectos económicos del 1 de junio.
El IMV garantiza a los hogares españoles una renta mínima de
10.070 euros de media al año (839,2 euros al mes), aunque la cuantía
depende del número de miembros de la familia, con lo que partirá de
461,5 euros al mes para un solo adulto, hasta 1.015,3 euros para
familias de al menos cinco personas.