La Mesa da Madeira acuerda retirar la madera quemada de los montes gallegos en un plazo mínimo de un año
La industria del norte de Portugal adquirirá hasta 2 millones de metros cúbicos
Xunta, empresas y asociaciones de propietarios se comprometieron a retirar la madera quemada de los montes gallegos en un plazo mínimo de un año y al mismo precio que se pagaría por cada tonelada de 'madera verde'. El director xeral de Montes, Alberte Blanco, manifestó que el acuerdo sellado en Santiago permitirá que en dos meses se haya extraído toda la madera de calidad y que en junio de 2007 se concluya el proceso de corta de la restante: la empleada para la trituración y la pasta de papel, así como la que se usa como biomasa. El acuerdo implica que la industria gallega del sector adquirirá los más de 5 millones de metros cúbicos de madera quemada que se extraigan. Esta medida hará "traballar ao límite das súas posibilidades" a las empresas del sector -que pueden absorber hasta 7 millones de madera anuales-, como indicó el gerente de la Asociación Galega Monte-Industria, Juan Picos. No obstante, señaló que la industria tiene "capacidade de consumo". En la adquisición de la madera quemada participarán también empresas del sector ubicadas en el norte de Portugal y la Consellería de Medio Rural ha hecho extensible esta invitación a las industrias de comunidades próximas como Castilla y León. Por el momento, varias empresas lusas han comprometido la compra de "un ou dous millóns de metros cúbicos", como adelantó Blanco. La prioridad expresada por el responsable de Montes y los representantes implicados en el sector pasa por agilizar las labores de retirada de la madera, en especial la de calidad, para evitar que se deteriore, pierda peso y pueda dar lugar a plagas y enfermedades. Según advirtió el portavoz de la industria gallega, son los propios productores los que tienen la "chave" para acelerar este proceso. Las empresas se comprometen a comprar pero, antes, los propietarios deben vender su madera. En este sentido, el responsable de la Asociación Sectorial Forestal de Galicia (Asefoga), Jacobo Feijoo, manifestó su intención de informar a todos sus asociados para que se efectúe la venta y la corta de la madera lo antes posible. Esta organización estima que se va a registrar una pérdida del 20 por ciento del peso de la madera, lo que repercutirá en el peso final. Feijoo afirmó, además, que trabajarán para "dar transparencia" al descuento que se realizará del precio en fábrica por los costes de producción -la corta y el transporte de la madera desde la parcela hasta la planta industrial. A este factor se sumarán las condiciones meteorológicas que, de ser adversas, situarán a la industria en una situación compleja, al impedir la extracción de materia prima. Acuerdo de precios El director xeral de Montes expresó su satisfacción tras producirse el primer pacto de precios de venta de la madera ya que, como explicó, anteriormente cada uno de los agentes implicados "ía pola súa parte". El precio de referencia establecido para la venta 'en fábrica' de la madera variará en función de la especie y del tipo de madera. En el caso de la materia prima de calidad, la industria pagará entre 42 y 47 euros la tonelada de pino y entre 40 y 54 la de eucalipto. Esta es la clase de madera que se destina a los aserraderos y se emplea en la industria de segunda transformación. La tonelada de pino cuya finalidad sea el triturado para la elaboración de pasta de papel, por ejemplo, oscilará entre los 30 y los 36 euros. La de eucalipto rondará los 32 y los 41 euros. A su vez, la rama de pino o eucalipto que se emplée como biomasa estará entre los 18 y los 27 euros por tonelada.