Tres de cada diez municipios gallegos disponen de un punto limpio para depositar residuos

Están en ejecución los proyectos de A Gudiña, A Peroxa, Becerreá, Guntín, A Guarda y Porto do Son

Dos municipios de Lugo (Becerreá y Guntín), dos ourensanos (A Peroxa y A Gudiña), uno pontevedrés (A Guarda) y uno coruñés (Porto do Son) están en el proceso ejecución de las obras de sus respectivos puntos limpios, que en conjunto alcanzan una inversión que supera los 1,2 millones de euros. Se trata de seis proyectos que se sumarán, en los próximos meses, a los 87 concellos gallegos que ya disponen de este servicio gracias a la inversión de la Consellería de Medio Ambiente, aunque buena parte de las obras se financian a través de fondos europeos. En Galicia, tres de cada diez localidades disponen de un punto limpio y, porcentualmente, Lugo es la provincia que alcanza una mayor presencia de este tipo de servicios. De hecho, casi un 40 por ciento de los concellos ya han concluido las obras, mientras en Pontevedra la cifra alcanza al 37 por ciento, A Coruña se queda en un 31 por ciento y Ourense un 15 por ciento. No obstante, estos servicios se construyen a partir de la petición de los propios municipios que, una vez finalizadas las obras, pasan a ser propietarios de los puntos limpios, por lo que asumen su gestión directamente o la sacan a concurso y se la encargan a una empresa. De hecho, son los concellos los que facilitan una parcela para la ubicación de los puntos limpios, según especifican técnico de la Consellería. En números absolutos, Pontevedra cuenta con 29 puntos limpios, Lugo con 27, Ourense con 14 y Pontevedra con 23. Obras concluidas Durante el año en curso, Medio Ambiente ha concluido las obras de construcción de 19 puntos limpios, de los cuales dos (el de O Pino y el de Oza dos Ríos) están pendientes que se efectúe la entrega a los respectivos concellos, pues la gestión corre a cargo de ellos una vez acaban los trabajo de ejecución. En total, las obras realizadas para construir este tipo de dispositivos de recogida de residuos durante el año 2006 han supuesto una inversión que supera los 5,6 millones de euros. Buena parte de este presupuesto procede de fondos europeos, aunque hay excepciones. Los puntos limpios de Silleda, en Pontevedra, y Lourenzá, en Lugo, se ejecutaron durante el año en curso pero con fondos propios de la Consellería de Medio Ambiente. Infraestructuras Los puntos limpios se diseñan a partir de un proyecto tipo que es común a todos. Así lo aseguran fuente de la Consellería de Medio Ambiente, que matizan que lejos de ser un lugar donde puedan depositar residuos las empresas, se trata de un servicio destinado al ciudadano, aunque no se puede llevar a este punto materia orgánica. Concretamente, los contenedores están divididos en función del tipo de residuos. Así, por un lado se depositan el vidrio, en otro el papel o el cartón y también los hay para escombro o materiales voluminosos (electrodomésticos), así como para restos vegetales. Una caseta especial se destina a los denominados residuos peligrosos (como las pilas, lámparas o similares). Fuentes de Medio Ambiente aseguran que en la actualidad están trabajando en nuevos proyectos para ampliar el número de puntos limpios de las cuatro provincias gallegas durante el próximo año, aunque por el momento se trata de cuestiones que están estudio.