El Reino Unido elevó hoy la alerta al nivel "crítico", el máximo de cinco, y desplegó al Ejército para apoyar a la Policía ante la posibilidad de un "inminente" atentado como el perpetrado ayer en el Manchester Arena por un joven suicida que causó 22 muertos y 59 heridos.
La primera ministra británica, Theresa May, anunció en una comparecencia en su residencia de Downing Street la nueva alerta al señalar que significa que un ataque se puede producir de manera "inminente", por lo que miembros de las Fuerzas Armadas patrullarán junto con la policía en algunas zonas.