SOFÍA | Las segundas elecciones en Bulgaria en tres meses no desbloquearon el
punto muerto en el que se encuentra el país. Los conservadores y el
partido protesta Existe Tal Pueblo (ITN) se disputan una ajustadísima
victoria tras los comicios de ayer que no les dará una mayoría
para gobernar.
Aunque las encuestas a pie de urna dieron al cerrar los colegios
electorales la victoria por escaso margen a los conservadores de
Ciudadanos para el Desarrollo Europeo de Bulgaria (GERB), liderados por
el ex primer ministro Boiko Borisov, con el paso del tiempo ese triunfo
se puso cada vez más en duda.
A falta de
datos oficiales, los recuentos paralelos de Gallup International sitúan
ahora a ITN primero con un 23,2%, por delante del GERB, que está en un
22,9%. Otra empresa demoscópica, Alpha Research, también coloca a ITN
primero con un 23,9 % y a GERB segundo con un 23,5%.El voto de
los búlgaros residentes en el extranjero, que mayoritariamente apoyan a
la oposición, terminó por inclinar la balanza para el partido que lidera
el cantante y presentador Slavi Trifonov.
"No quiero ser profeta,
pero el recuento del voto desde el extranjero hará que Existe Tal
Pueblo sea la fuerza más votada, seguida, lamentablemente, por el GERB",
vaticinó el domingo también el vicepresidente del partido protesta,
Toshko Yordanov.
Los conservadores ya ganaron las elecciones del
pasado 4 de abril con casi el 26 %, pero la negativa del resto de los
partidos a unirse a ellos en una coalición y la ausencia de una
alternativa de gobierno abocó a los comicios adelantados de este
domingo.Ni una década en el poder, un sinfín de escándalos de
corrupción en los últimos meses y una oleada de protestas el pasado año
han desgastado demasiado la formación del tres veces primer ministro
Borisov.
Sin embargo, incluso una posible victoria de la formación
de Borisov, un antiguo guardaespaldas de 62 años que ha dominado la
política búlgara en la última década, no le abre nuevas opciones de
volver al poder debido a su falta de socios.Según los sondeos, la tercera formación sería el Partido Socialista, con alrededor del 13 % de los apoyos.
También
entrarían en el Parlamento otros dos partidos nacidos de las protestas
anticorrupción contra el Gobierno de Borisov, la conservadora Bulgaria
Democrática, también con alrededor del 13 %, y la izquierdista
¡Levántate Bulgaria! ¡Mafiosos Fuera!, con el 5,5 %. La formación que aglutina el voto de la minoría turca, el Movimiento
de Derechos y Libertades, tendría un 11 % y puede ser clave en la
formación de cualquier mayoría.
Una coalición
liderada por Existe Tal Pueblo con los otros dos partidos protesta
estaría cerca de lograr una mayoría de Gobierno, pero necesitaría el
apoyo de una cuarta formación. La subida prevista de los partidos
protesta, Existe Tal Pueblo mejoraría en cinco puntos su resultado
respecto a abril, mientras que Bulgaria Democrática lo haría en tres, no
es suficiente para darles una mayoría en el Parlamento, que tiene 240
escaños.
Más del 40 % de los votantes ha apoyado a esos tres
partidos protesta que no existían antes de las elecciones de abril y que
culpan a Borisov de ignorar la corrupción o incluso de apoyar a los
oligarcas que se benefician de ella.Estas formaciones se han
negado hasta ahora a pactar con los socialistas y el partido de la
minoría turca porque los consideran parte del mismo sistema corrupto que
el GERB.
Por otro lado, estas formaciones carecen de experiencia
política y más allá de su posición contra la corrupción se sabe muy poco
del contenido que tendría un posible programa de gobierno. Otro
aspecto destacado de estas elecciones es la baja participación, que la
agencia demoscópica Alpha Research calcula en el 41 % y Gallup en el
38,4 %, mucho menor al 50,6 % registrado el 4 de abril. "Nuestra
principal hipótesis es que la baja participación es resultado de una
menor compra de votos", explicó a Efe Parvan Simeonov, politólogo y
director en Bulgaria de Gallup International.
Bulgaria ha
estrenado en estas elecciones un sistema de voto electrónico,
precisamente para luchar contra la compra de votos, una práctica
extendida en ciertas zonas rurales y pobres.
El nuevo sistema de votación por medio de máquinas dio pocos
problemas y solo en 56 colegios de los más de 12.000 hubo fallos
técnicos con el voto electrónico y se debió continuar el proceso con
papeletas, según la Comisión Electoral.
Desde el 1 de julio está
en marcha un operativo de la policía contra la compra de votos y, según
los últimos datos de Interior, más de 900 personas han sido detenidas o
interrogados. "Hoy ha sido un día muy bueno para la democracia
búlgara porque se celebraron las elecciones más justas hasta ahora. Y no
debido al resultado de Existe Tal Pueblo sino por las nuevas reglas
electorales que limitaron al máximo el voto comprado", sostuvo el líder
de la formación, Slavi Trifonov.Vladislav Punchev. EFE