La publicidad engañosa abarca la omisión de los aspectos negativos del producto hasta llegar al engaño, pasando por diversos trucos empleados para presentar más atractivos unos precios que realmente son más elevados; dicho de otra forma, la publicidad engañosa es la que se realiza con afirmaciones engañosas, exageradas o falsas acerca del producto o servicio y que afectan al comprador. Mensajes que incluyen expresiones ambiguas, desconocidas o con una variedad de significados que dan lugar a que el destinatario interprete el mensaje en un sentido que no corresponde a la realidad. Utilizando letra pequeña, ilegible, diminuta con el único sentido de que el comprador no se dé ni cuenta de ello. Mensajes que estimulan al cliente a tomar una decisión rápida pero que no se cumplen.
Omisión de datos fundamentales que podían influir en la decisión del consumidor, como ocultar los sobrecostes del paquete completo. La publicidad engañosa puede estar definida y castigada por las leyes, especialmente por la normativa de protección de consumidores. Como ejemplo la OCU denunció a las tres grandes operadoras de móviles por aplicar penalizaciones y la organización considera que son prácticas abusivas, también intentar cobrar facturas más de una vez.
A día de hoy solo Movistar está empezando a liberar los móviles de permanencia. También hay que hacer mención a la falta de educación y vergüenza de algunos vendedores que para comprar todo es hermoso y si surge algún problema, la culpa nunca es de ellos, siempre del comprador, el cual se ve envuelto en una vorágine de llamadas inútiles que parece que estas toreando un becerro y que nunca te dan la solución, a menos que pagues una penalización y así todo seguirás sin tener razón, no dejando de mencionar también las operadoras con acento latino, que no soy para nada racista, que siempre te contestan lo mismo “señorita María” y ni te escuchan, o llegar al punto de reírse y desconectar el micrófono para que no las sigas escuchando, esto es más que insultante, es un despropósito y una vergüenza, cuando hace cuarenta años, lo primero que te decían antes de ponerte a vender al público “el cliente siempre tiene razón”, y con mucha educación, ni una voz más alta que otra y por supuesto buena cara y sonrisa profiden, pero eso era antes, ahora todos son de Tudela; pero es que además se lo consienten, pero no se están dando cuenta que los clientes se hacen, pero lo difícil es saber mantenerlos y con el trato que tienen ante un problema, en vez de solucionarlos, los están echando a patadas. “Vamos de mal en peor señores”
Conchi Basilio