Manuel Loureda Calvete, exjugador del Deportivo de La Coruña, falleció a los 75 años de edad, víctima de una larga enfermedad. Loureda, apodado “El peluquero” (por la serie de negocios de este secto del que era propietario),formó parte del club blanquiazul en la equipo en la que se le denominaba “ascensor”, habiendo protagonizado múltiples ascensos y descensos.

Loureda, nacido en La Coruña, ha sido uno de los jugadores más significativos y representativos del club coruñés a lo largo de su historia, incluyendo también la época dorada de finales del siglo pasado y comienzos del actual. Perteneció durante veinte años a la disciplina del Real Club Deportivo, de los que catorce jugó con el primer equipo. Nunca quiso marcharse del club de toda su vida. Disputó más de 150 partidos en Primera División, habiendo marcado 66 goles. Fue entrenado, entre otros, por Roque Olsen, Carniggia, Cheché Martín, Arsenio, Carlos Torres o Irulegui.

El centrocampista blanquiazul, caracterizado principalmente por ser un jugador pundonoroso y sacrificado en el campo, llevaba el Deportivo en el corazón. En una de sus últimas entrevistas, concedida a “El Boletín Coruñés”, manifestaba que “lo peor para un futbolista es ser silbado por su propio público”, algo que le había ocurrido a él en numerosas ocasiones.

Una de las características principales de su carácter fue el miedo al avión, por lo que se daba auténticas palizas en coche o en tren para afrontar los desplazamientos del equipo. Aun así, como decía el propio Loureda, “acumulo más de 600 horas de avión”.
Loureda coincidió en el Deportivo con excelentes jugadores como Amancio, Veloso, Fernando Mendoza o Jaime Blanco. Pero , después de retirado, también tuvo una vida social muy intensa. Cantó en el grupo “Barrabás” y fue muy amigo de los cómicos Juanito Navarro y Lina Morgan, que le invitaban frecuentemente a fiestas en la capital de España. También tuvo mucha amistad con Rocío Dúrcal o Fernando Arbex, excomponente de “Los Brincos”.

La peña blanquiazul “La Cuesta”, de Cuatro Caminos, tuvo el acierto de nombrarlo a principios de 2017 como “deportivista del año”. En este acto coincidió con Arsenio Iglesias y Luis “El Chato”, entre otros antiguos compañeros.

Antonio Llamas