La ley de bases de sanidad nacional de 1944 y la ley orgánica 3/1986 de
medidas especiales para la salud pública dan cobertura a una posible
vacunación obligatoria de la covid-19, aunque algunos juristas llaman a
introducir nuevos instrumentos para hacer más efectivo el cumplimiento.
Las provisiones aprobadas en el siglo pasado en España para la difteria y
la viruela, incluida la posibilidad de declarar obligatoria la vacuna,
facilita el camino legal para que en su caso se pudiera obligar a la
vacunación, una medida que si bien se ajusta a Derecho no es la más
popular entre el colectivo médico por el efecto "contraproducente" que
pudiera acarrear.
Pero, ¿dónde dice concretamente que vacunarse tenga que ser obligatorio?
El abogado experto en temas de salud y profesor de la Universitat Oberta
de Cataluña (UOC) José Enrique Pérez Palaci ha explicado a Efe que para
empezar prevén el derecho a la vida y la integridad física y la
protección de la salud tanto en la Declaración universal de derechos
humanos, como el Convenio europeo de derechos humanos y la constitución
de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En España, el título primero de la Constitución recoge el derecho a la
vida y a la integridad física (artículo 15) y en el artículo 43 se
desarrolla que compete a los poderes públicos organizar y tutelar la
salud pública a través de medidas preventivas y de las prestaciones y
servicios necesarios. Más allá, en la ley 22/1980, que modifica la ley de bases de la sanidad
de 1944, se prevé concretamente que las vacunas contra la viruela,
difteria y otras infecciones podrán ser declaradas obligatorias por el
Gobierno.
"Las vacunaciones contra la viruela y la difteria y contra las
infecciones tíficas y paratíficas podrán ser declaradas obligatorias por
el Gobierno cuando por la existencia de casos repetitivos de estas
enfermedades o el estado epidémico del momento o previsible se juzgue
conveniente", dice ese precepto en su artículo único. También sigue vigente un decreto del año 1945 que aprobó el reglamento
para la lucha de las enfermedades infecciosas que en su artículo 21
declara que podrán ser obligatorias para todos los ciudadanos españoles
las vacunaciones contra la difteria y la viruela, "siendo sancionadas su
falta de realización".
Para juristas como Pérez Palaci, "por analogía" se podría asimismo
declarar obligatoria la vacuna para la pandemia por la COVID-19. Si bien la ley de 2002 sobre autonomía del paciente apunta a que la
persona afectada puede aceptar o rechazar algunas terapias, ese derecho a
decidir tiene algunas excepciones, principalmente el riesgo a la salud
pública. Ese riesgo está desarrollado en la ley orgánica 3/1986, que en su
artículo 2 declara la posibilidad de que las autoridades tomen cualquier
medida necesaria para preservar la salud pública.
Para el jurista, el asunto de la vacunación obligatoria es, finalmente,
la colisión de dos derechos, el derecho a la protección de la salud, que
prevalece en el caso de una pandemia como la covid-19, y el derecho a
la intimidad y privacidad. "Ahora bien, si la normativa existente puede causar cierta confusión,
también el ejecutivo y el legislativo pueden intervenir al respecto y
modificarla introduciendo artículos pertinentes tanto en el código penal
como en una nueva ley orgánica o de modificación de la ley general de
salud pública", ha señalado.
Para la profesora de Derecho Constitucional de la Universidad de
Barcelona (UB) Mar Aguilera, "más que declarar la obligatoriedad en la
ley, será clave establecer cuáles son las consecuencias de la no
vacunación". En conversación con Efe, Aguilera ha dicho que "es importante dejar
claro cuáles son las consecuencias y que estas sean proporcionales",
preceptos que tendrían que prever y valorar múltiples casuísticas como
"¿qué pasa si unos padres siguen llevando a su hijo sin vacunar de la
covid-19 a la escuela?".
Desde el mundo médico, sin embargo, insisten en que no es lo más
apropiado declarar obligatoria la vacuna "porque podría tener efectos
contraproducentes", ha explicado a Efe la jefa de epideomología del
hospital barcelonés Vall d'Hebron, Magda Campins. "Si obligas a la gente, éstos pueden ser más reticentes. Esperamos
llegar a coberturas de vacunación de la población altas sin tener que
llegar a la obligatoriedad", ha dicho la facultativa. EFE