EFE | El presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana
Empresa (Cepyme), Gerardo Cuerva, ha reclamado que se simplifique la
tramitación de los ERTE y estos se pueden prorrogar de forma automática
mientras dure la pandemia, cuya tercera ola llegará a un tejido
productivo más "deteriorado".
En declaraciones a Efe, el también
líder de la patronal y de la Cámara granadina ha asegurado que los
empresarios necesitan "más certidumbre" en un contexto tan "inédito y
complicado" como el que se vive desde hace muchos meses. "Ha pasado casi un año desde el inicio de la pandemia, estamos
iniciando una tercera ola que se adivina peor que las anteriores,
partimos de una situación más deteriorada y seguimos sin ver la salida
del túnel ni las medidas necesarias para que las empresas puedan
sobrevivir en estas circunstancias", ha indicado.
Cuerva ha
detallado que las empresas ya se han endeudado en más de 100.000
millones de euros, el 90 % han sufrido caídas de sus ingresos, en
algunos casos del 100 % y el 50 % ven en riesgo su supervivencia.
En
estas condiciones, los empresarios afrontan como un nuevo "factor de
incertidumbre" la nueva prórroga de los Expedientes de Regulación
Temporal de Empleo (ERTE), que desde marzo han contribuido a
salvaguardar el empleo y, a su juicio, deberían tener garantizada ya la
continuidad hasta que finalice la pandemia. "Debemos saber a qué atenernos y con qué medidas vamos a poder contar en
cada momento para garantizar la continuidad de los negocios", ha
sentenciado Cuerva, partidario de simplificar los trámites y que ve
igualmente necesario que la prolongación y la tramitación sea
"automática", de manera que se eviten las dilaciones para empresas y
trabajadores.
Según el presidente de Cepyme, no se entiende que el Gobierno no crea
que hay que dar flexibilidad a la empresa para que mantenga todo el
empleo posible y se empeñe en condiciones que hagan quebrar a muchas
empresas. "Así no mantendremos el empleo. Las pequeñas y medianas
empresas han hecho un esfuerzo muy grande para mantenerse abiertas sin
actividad. Si además de tener muchas menos medidas que el resto de
nuestros países vecinos nos obligan a devolver parte de las ayudas que
nos han dado, muchas quebrarán. No es culpa de las empresas que la
crisis del coronavirus esté durando cerca ya de un año, ahora con una
tercera ola", ha advertido.
Asimismo, ha apostado por complementar
los ERTE con otras medidas dirigidas a facilitar la reestructuración de
las empresas y fomentar la actividad económica, así como ayudas
directas en los sectores más afectados como la hostelería y el comercio,
en la línea de las aplicadas en países como Alemania o Francia.
En relación a los fondos europeos, cree que son "sin duda necesarios y
un balón de oxígeno" para la economía, fundamentales para lograr la
recuperación, pero también cree necesario que se gestionen "con
eficacia", con la colaboración de las empresas orientados hacia planes
ambiciosos para a modernizar el sistema productivo. En cuanto a la
incidencia que vaya a tener en el sector económico la tercera ola, ha
manifestado que las nuevas restricciones recaen sobre un tejido
productivo "más debilitado", ya en una situación límite.
En
sectores como la hostelería, el turismo o el comercio, la presencia de
las pymes es mayoritaria y, en muchos casos, han invertido recursos y
esfuerzos para adaptarse a esta nueva situación y seguir trabajando, con
un futuro está "seriamente comprometido", ha concluido.