EFE | "Nuestra primera misión es combatir la
pandemia", afirmó el presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa,
tras confirmarse su triunfo en las elecciones celebradas en Portugal.
Rebelo, de 72 años, expresó su voluntad de ser el "presidente de
todos y cada uno de los portugueses, próximo, que no sea de los buenos
contra los malos".
"La confianza ahora renovada es todo menos un cheque en blanco",
dijo en su primera intervención tras las presidenciales, en las que se
impuso con un 60,72 % de los votos.
"Me siento profundamente honrado y agradecido por esta
confianza", señaló el candidato conservador, que dedicó buena parte de
su discurso a recordar a las víctimas de la pandemia del coronavirus y a
defender el pluralismo político.
Los portugueses, afirmó, "no quieren una pandemia, una crisis
sin fin a la vista, un empobrecimiento agravado, un sistema político
lento, radicalización y extremismo".
"Los portugueses quieren más y mejor". Más en "proximidad,
estabilidad", en justicia social y en "gestión de la pandemia", agregó
Rebelo de Sousa, que renueva su mandato por cinco años.
El presidente fue el gran triunfador en una jornada marcada por
la abstención, un 60,51 %, el avance del ultraderechista André Ventura y
el desplome de la izquierda.