MADRID | La lista de espera de la dependencia se redujo en 2020, pero a costa del
aumento de personas fallecidas en el año de la pandemia: murieron
55.375 personas -152 cada día- esperando un servicio al que tenían
derecho o una respuesta de la administración. Siguieron desatendidas
otras 232.243 personas.
El total de dependientes fallecidos durante 2020 ascendió a 248.751
personas, según el balance del Observatorio Estatal para la Dependencia
en el año de la covid, que advierte de un exceso de mortalidad de 52.835
personas, siendo abril el mes más crítico en muertes, seguido de marzo y
diciembre.
"Ha sido un año de retroceso marcado por la pandemia, ha sido
terrorífico, de muchísimo dolor, sufrimiento y muerte", ha explicado el
presidente del Observatorio, José Manuel Ramírez, en la presentación de
esta evaluación, quien ha lamentado que "uno de cada cuatro dependientes
fallecidos estaba en la lista de espera".
"Miren este dato terrorífico: cerca del 80 % de las personas que
salieron de la lista de espera entre marzo y diciembre, lo hicieron por
fallecimiento, para vergüenza de los gobernantes", ha aseverado. Casi siete de cada 10 personas desatendidas, que permanecen en la lista
de espera, viven en Cataluña (73.386), Andalucía (56.534) y Madrid
(28.494). El sistema registra un total de 1.124.230 dependientes, a 31
diciembre de 2020.
"El impacto de la Covid-19, el complejo procedimiento a veces
inmisericorde y que la vicepresidencia de Derechos Sociales no
incrementó el presupuesto ni un solo euro nuevo en el año 2020, han sido
los principales motivos de ese retroceso", ha señalado Ramírez. Sobre la decisión de Pablo Iglesias, responsable de ese departamento, de
abandonar el Ejecutivo para presentarse a las elecciones en Madrid, ha
reconocido tener un "sentimiento agridulce", por esa falta de inversión
en 2020 "cuando más se necesitaba", pero "dulce" por la aprobación de
600 millones para 2021 que permitirán reducir la lista en más de 100.000
personas y revertir los recortes desde 2012.
Residencias
Solo en el mes de abril se registraron 34.977 personas fallecidas, un
113,4 % superior a lo esperado, superando al mes anterior, en el que
hubo 25.244 fallecimientos, indica el informe.
De los cerca de 250.000 fallecidos, el 80,7 % tenían más de 80 años, el
14,8 % tenían entre 65 y 79 años y un 4,4 5 menos de 65 años.
La mortalidad ha afectado más a mujeres que a hombres, sobre todo a las
de más de 80 años, con 107.401 mujeres fallecidas y 60.281 hombres (el
51,7 % y 29 % del total). Se han registrado 72.804 fallecimientos de personas atendidas en
residencias; entre ellas, el exceso de mortalidad por impacto del
Covid-19 se estima en 26.340 personas. De los fallecidos en espera, 21.005 no tenían aún resolución y 34.370
habían sido reconocidos como dependientes pero no disfrutaban de
servicios o prestaciones.
De las personas que siguen en la lista, cuatro de cada diez son
dependientes más graves (Grados III o II). A ellas hay que añadir
141.556 expedientes que están pendientes de valoración, con lo que la
desatención supera las 370.000 personas. Las prestaciones económicas por cuidados familiares tienen un importe
medio mensual de 306 euros (percibidas actualmente por 450.000
personas): 138 euros para los Grado I; 242 para los Grado II y 335 para
los Grado III.
Casi dos años después de que se recuperase el derecho de las personas
cuidadoras familiares a poderse dar de alta en el convenio especial de
cuidadores no profesionales, solamente 60.293 lo están (el 13,4 % del
total de las cuidadoras). La prestación vinculada para abonar una plaza de atención residencial oscila en torno a los 447 euros al mes.La Ayuda a Domicilio tiene una media de horas al mes de 17 horas para Grado I; 36 para Grado II y de 57 para los Grado III.
Castilla y León, la mejor; Cataluña, la peor
Se mantienen las enormes desigualdades tanto en cobertura, como en
modelos de gestión. En la puntuación que hace la Asociación de
Directoras y Gerentes de Servicios Sociales, de la que depende en
observatorio, solo ocho comunidades aprueban y la media se sitúa en el
4. Se valora el gasto, calidad de servicios, lista de espera, tiempos de
respuesta o empleo generados, entre otros indicadores.
Mejoran puntuación con respecto al año anterior y sacan las mejores
notas: Castilla y León (8,9), Andalucía (7,1) y Castilla La Mancha
(7,1); empeoran Ceuta y Melilla (2,5), Canarias (2,1) y Cataluña (1,4),
que se sitúa en la última posición. Por encima del aprobado también están Galicia (6,8), Baleares (6,1), País Vasco (5,4), Extremadura (5) y La Rioja (5). Suspenden con mejor nota que Cataluña y Canarias, Madrid (3,2), Aragón
(3,2), Cantabria (3,6), Murcia (3,9) Valencia (3,9), Navarra (3,9) y
Asturias (4,3).
El informe detalla que hay comunidades que no han mantenido la tasa de
reposición de beneficiarios en el último año: Cataluña (-4,2 %), Aragón
(-4,3 %), Madrid (-7,1 %) y La Rioja (-7,8 %). Por el contrario, la tasa de variación interanual de personas atendidas
ha sido muy positiva en el último año en Comunidad Valenciana (15,7 %),
Asturias (14,8 %), Baleares (11,6 %) y Canarias (7,2 %). En situación muy preocupante por el limbo de la dependencia sitúa a: Cataluña (31,9 %), La Rioja (29,3 %) y Canarias (24,4 %).
Otros datos:
- El 3,6 % de la población española necesita apoyos de mayor o menor
intensidad para desarrollar las actividades básicas de la vida diaria.
- Por primera vez desde 2014 se ha reducido las personas en situación de
dependencia, hay 28.564 personas menos reconocidas en situación de
dependencia menos que al inicio del año.
- Retroceso sistema: 43.794 solicitudes menos, 26.157 resoluciones menos
(-1,7%) y tiempo medio de tramitación de un expediente es de 430 días.
- Por primera vez en la historia del sistema ha disminuido el empleo generado, se han perdido 7.000 puestos de trabajo.
- El recorte acumulado del estado en dependencia tras los de 2012 es de
6.321 millones de euros considerando la supresión del nivel acordado, la
reducción del nivel mínimo y la supresión de las cotizaciones de las
cuidadoras familiares.
- Del gasto público directo en dependencia en 2020, la Administración
General del Estado soportó el 19 % y las Comunidades Autónomas el 81%
restante
- Destaca que el plan de choque para la dependencia supone el fin de los
recortes desde 2012, con una aportación del Gobierno para dependencia
de 1.920 millones de euros, un aumento del 48 %. EFE