Rubio responde al PP que la Inspección Médica hace "auditorías todos los años" en los centros públicos gallegos

Dice que ahora se revisan las listas de consultas y de pruebas diagnósticas

La conselleira de Sanidade, María José Rubio, aseguró que la Inspección Médica realiza "auditorías todos los años" en los centros del sistema público sanitario de Galicia y que en este momento revisa las cosultas y las pruebas diagnósticas. Así se pronunció en declaraciones a los medios en relación a las declaraciones realizadas el lunes por el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, en las que reclamaba la elaboración de un auditoría completa en el sistema sanitario. Asimismo, recordó que ya se realizó una auditoría sobre cirugía y que ahora la Inspección Méidica realiza las otras dos mencionadas, ya que el departamento que dirige las considera una "herramienta importante de gestión". Al respecto, matizó que "el problema no son las auditorías", sino la "herencia que el PPdeG" dejó, al "ocultar 7.000 pacientes" del centro de Povisa que no estaban incluidos en lista de espera. De hecho, recordó que de los 40.000 pacientes, en los que se incorporaron los anteriores, ya se han operado 6.000. Lista no estructural En cuanto a la lista de espera no estructural, Rubio incidió en que fue el propio Partido Popular, desde los gobiernos central y autonómico en 2003, el que aprobó el sistema de listas diferenciadas que determina dos tipos de listado y que está recogido en el Boletín Oficial del Estado. Por ello, la titular de Sanidade achacó a una "búsqueda de la polémica" que los 'populares' "quieren lanzar", dejando "entrever" que existen "dos listas de espera que se están abordando de forma paralela". Así, matizó que el sistema de listas fue creado por el PPdeG y que la no estructural --a la que pasan los pacientes que rechazan acudir a un centro concertado o que por causa médicas son derivadas a esa lista--, se está abordando también y que ya fueron operados 2.000 pacientes de ella. Preguntada por las razones de que los usuarios decidan no operarse en los centros concertados y por la posibilidad de que se deba a una razón de desconfianza, Rubio apuntó que muchos pacientes "prefieren" se operados por un facultativo de la pública pero incidió en que la asistencia en estos centros "está garantizada". De este modo, puntualizó que cuando un paciente rechaza ser operado, pasa a la lista de espera no estructural, en la que "no está contabilizada" el tiempo porque "no se puede considerar demora médica". Sin embargo, afirmó que se les "vuelve a llamar".