MADRID | La
comisión parlamentaria de investigación sobre la operación Kitchen ha
concluido que la cúpula del PP ordenó esta presunta trama parapolicial
de espionaje a su extesorero Luis Bárcenas, con el conocimiento de la ex
secretaria general María Dolores de Cospedal, "que informaba" al
expresidente Mariano Rajoy.
Con 159 votos a favor -PSOE, Unidas Podemos y EH Bildu-, 149 en contra
-PP, Vox y Ciudadanos- y 29 abstenciones -ERC, PNV y Grupo Mixto- la
comisión ha aprobado un dictamen que concluye que esta operación
perseguía que "las pruebas que pudieran estar en posesión" de Bárcenas
"se destruyeran u ocultaran para que nunca fueran utilizadas" por la
Justicia, informan a Efe fuentes parlamentarias. "Y para esta finalidad de interés particular exclusivo del Partido Popular
se utilizaron presuntamente fondos reservados y efectivos policiales de
manera irregular", señala el texto aprobado a propuesta del PSOE, que
decidió presentar su propuesta de conclusiones en solitario.
Finalmente, los socialistas han conseguido sacar adelante su escrito,
aunque han aceptado incorporar algunos cambios en la redacción y dos
cuestiones del documento que presentaron conjuntamente Podemos, ERC,
Junts, EH Bildu y CUP, que reclamaban una revisión en la concesión de
medallas policiales y en el control de los fondos reservados.
El documento aprobado -se someterá a la ratificación del pleno el Congreso con el nuevo curso parlamentario en 2022- responsabiliza a la cúpula directiva del PP de ordenar "la utilización partidista,
delictiva e ilegal de efectivos, medios y recursos del Ministerio del
Interior" para encontrar pruebas que estuviesen en poder de Bárcenas y
que inculparan al partido "sobre la financiación irregular y los casos
de corrupción durante los años en que gobernaban". Señala que la operación, investigada en la
Audiencia Nacional y que se remontaría a 2013, se dirigía desde la sede
del PP, "con el conocimiento" de Cospedal, "que informaba" a Rajoy"; y
desde Interior, "con el ministro Jorge Fernández Díaz, que le encargó" a
su segundo Francisco Martínez su puesta en marcha.
Y el "epicentro" estaría en la Dirección Adjunta Operativa de la Policía, que aquellos años dirigía Eugenio Pino. El texto apunta de esta forma, según han
puesto de manifiesto algunos comparecientes, a la implicación de "los
responsables políticos máximos" de Interior, como Fernández Díaz,
Martínez y el exdirector de la Policía Ignacio Cosidó; así como de
Cospedal y "de forma indiciaria" de Rajoy.
De Cospedal afirma que, no sólo era
conocedora de la trama, sino que "pudo recibir copia de la información
sustraída" al PP dada su condición de secretaria general y "como
supuesta beneficiaria de sobresueldos de esa financiación irregular". Cuestiona que Rajoy se negase "a asumir responsabilidad alguna"
en la comisión y llegase "a mentir de manera abierta" al negar que
existiese una caja B en el PP cuando hay dos sentencias que así lo
concluyen, y pone en valor que el excomisario José Manuel Villarejo lo
señaló "directamente" al decir que se comunicó con él sobre la
operación.
También mencionan el "descontrol absoluto de los fondos reservados" y el "despilfarro de dinero público" en esta operación. Con el trámite de hoy se pone punto y final a la comisión Kitchen
abierta hace nueve meses en los que han comparecido 37 personas, diez
de ellos procesados en la causa que tiene abierta la Audiencia Nacional.
La última sesión de la comisión, la
número 26 y celebraba a puerta cerrada, ha puesto de relieve que la
mayoría de partidos están de acuerdo en el fondo -la trama de espionaje
existió y los responsables políticos en el Gobierno y el PP estaban
detrás-, si bien los grupos que se han abstenido han lamentado que se
podía haber ido "más lejos" en las conclusiones.
Seis propuestas de conclusiones se han
presentado a la comisión -PSOE; Podemos junto con ERC, Bildu, Junts y
CUP; PP, VOX, PNV y Ciudadanos. Solo la de los socialistas han logrado
mayoría.
El PP ha evitado pronunciarse tras hacerse públicas las conclusiones de la comisión
Kitchen y desde Génova recuerdan que desde febrero no comentan las
noticias sobre presuntos casos de corrupción que en todo caso
circunscriben al pasado.
Antes de acordar el dictamen la portavoz del PP
en el Congreso, Cuca Gamarra, ha reiterado que la comisión ha sido una
"causa general". Ciudadanos ha justificado a Efe su voto en contra, toda vez que la
mayoría no ha admitido en las conclusiones el impulso a acometer
reformas legales en materia de lucha contra la corrupción. EFE