SANTIAGO DE COMPOSTELA | Una veintena de ayuntamientos gallegos con alta producción láctea y
cinco organizaciones agrarias vienen de firmar sendas cartas promovidas
por la Consellería de Medio Rural para instar a la ministra de
Transportes a que se reúna con los convocantes del paro que lleva días
afectando al sector primario. En concreto, como medida que consiga uno
desbloqueo inmediato de la situación, piden que se abra una línea de
diálogo con los transportistas que, en el caso de nuestra comunidad, son
pequeños y medianos empresarios que se encuentran -según se señala en
ambas misivas- en una situación insostenible derivada del alza de los
precios de los combustibles.
Cuanto a los ayuntamientos firmantes,
se trata de los coruñeses de Mazaricos, Santa Comba, Frades, Trazo,
Mesía, Curtis, Touro y Tordoia; de los lugueses de la Pastoriza, Castro
de Rei, Sarria, Cospeito, Guntín, Chantada, Taboada, Palas de Rei y
Portomarín; y de los pontevedreses de Lalín, Rodeiro y Silleda. Forman
parte del grupo de 25 municipios de la comunidad en los que se recogen
más de 100.000 litros de leche al día. Al respecto de las organizaciones
agrarias, son Uniones Agrarias, el Sindicato Labrador Gallego, la
Federación Rural Gallega (Fruga), la Asociación Gallega de Cooperativas
Agrarias (Agaca) y la Asociación Agraria de Galicia (Asaga).
En
ambas cartas, los firmantes muestran su preocupación por las
consecuencias que está teniendo en la actividad de los ganaderos
gallegos el paro del transporte. En estos momentos, aseguran constatar
dificultades de abastecimiento de materias primas en las fábricas de
piensos, empresas que no están recogiendo la leche de las granjas o que
la mayoría de las industrias agroalimentarias gallegas no pueden sacar
su producto terminado hacia la distribución. Si la situación actual
persiste, según añaden en las misivas, existe un riesgo claro de colapso
de la totalidad del sector primario gallego. Por eso, demandan medidas
de protección que palíen una situación que se viene agravando, dicen,
desde la inasumible subida de costes de producción que comenzó en 2021.
En
concreto, los ayuntamientos y organizaciones que suscriben las misivas
reclaman que -mientras no se desbloquee la situación a través del
diálogo a lo que instan a la ministra de Transportes- se traslade al
delegado del Gobierno en Galicia la necesidad de establecer corredores
seguros que garanticen los servicios esenciales en nuestro campo.
Así, en las cartas se reclama el transporte de la leche desde las
explotaciones a las industrias lácteas, así como el de los productos
elaborados en ellas hacia las empresas de distribución. En paralelo, se
urge a la entrada en las fábricas de las materias primas y consumibles
necesarios para sus procesos productivos. En ese sentido, recalcan que
hay industrias lácteas que suspendieron la recogida de leche por no
poder sacar su producción de las fábricas y tener completada su
capacidad de almacenamiento, o por falta de materiales para sus procesos
productivos.
A mayores, en las cartas se refieren al transporte
de cereales y del resto de materias primas de alimentación animal desde
los puertos a las fábricas de piensos y hacia las explotaciones,
teniendo en cuenta además que las granjas intensivas avícolas, cunícolas
y porcinas no cuentan con otra fuente de alimentación para el ganado.
Más
allá del envío de estas misivas, cabe añadir que el conselleiro del
Medio Rural, José González, acompañado del director general de
Ganadería, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, José Balseiros,
mantendrá esta tarde un encuentro con representantes de las industrias
cárnicas para abordar su situación ante el paro del transporte. La
reunión se suma a las mantenidas ayer mismo con ganaderos de vacuno de
leche de Mazaricos y con representantes de las industrias lácteas. En
ambos casos, estos agentes de la cadena de valor coincidieron con la
Xunta en la necesidad de desbloquear la actual situación y en instar al
Gobierno central a que actúe para garantizar tanto la llegada de
suministro a las fábricas como la salida de producto, con el fin de
asegurar también la recogida de la leche en las granjas.