Fomento inaugura dos tramos de la Autovía del Cantábrico en Lugo
Suman una longitud de 11,6 kilómetros y una inversión de 58,6 millones
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, asistieron a la inauguración de dos tramos de la Autovía del Cantábrico en Lugo. Se trata de 11,6 nuevos kilómetros ya abiertos al tráfico entre Vilaba y Abeledo (Lugo) que han supuesto una inversión de 58,6 millones de euros. Con estos tramos, Fomento asegura que ya está en servicio más de la cuarta parte de la A-8 en Galicia, si bien el resto está en obras. El fin de esta autovía es conectar Galicia con la cornisa cantábrica mediante una vía de alta capacidad que absorba el tráfico de largo recorrido que hasta ahora se canaliza a través de la carretera N-634. Asimismo, la A-8 permite reducir los tiempos de viaje y permite una conducción más cómoda y segura para los usuarios. El tramo entre Vilalba y Regovide tiene una longitud de 5.840 metros y dispone de dos enlaces en Vilalba Oeste y en Vilalba Norte Asimismo, está previsto en un futuro un entronque en este enlace con la autovía AG-64 Ferrol-Vilalba, de titularidad autonómica. Asimismo, en el tramo se han ejecutado un viaducto, siete pasos superiores y ocho inferiores. Respecto al tramo que une Regobide con Abeledo, tiene una longitud de 5.840 metros, que comienza a tres kilómetros del sur de Vilalba y discurre por los términos municipales de Vilalba y Guitiriz. Cuenta únicamente con un enlace y el tramo cuenta con un viaducto, cinco pasos superiores y siete pasos inferiores. En cuanto a las medidas adoptadas para corregir el impacto ambiental, destacan las correspondientes a la construcción de un paso de fauna y la integración paisajística de las obras mediante revestimientos, revegetación de taludes, plantaciones arbóreas y siembra de especies vegetales adecuadas a las características climáticas de la zona. Fomento señala también como relevantes las prospecciones arqueológicas acometidas en las zonas de Vilar da Pedrosa y Os Castros, donde se han detectado hallazgos de interés, que han sido clasificados e inventariados. El coste de las medidas ambientales realizadas en estos tramos han ascendido a dos millones de euros.