La denominada "Operación Castaño", que desarrolla la Policía Nacional, se saldó con la detención de 11 personas -dos de ellas en Galicia- al ser interceptada una embarcación que se dirigía hacia las costas gallegas y en las que fueron interceptados 4.000 kilos de cocaína. Según informaron fuentes policiales, las cuatro toneladas incautadas estaban distribuidas en 154 fardos en el interior del barco "nodriza", que no enarbolaba ninguna bandera en el momento de ser abordada por los efectivos GEO. Como consecuencia de los hechos, 11 personas fueron arrestadas, entre las que se encuentran los seis tripulantes de la embarcación, tres personas detenidas en Madrid, una en Pontevedra y otra en la localidad coruñesa de Ribeira. "Operación Castaño" La operación se inició cuando efectivos mexicanos y madrileños constataron que en España se estaba estableciendo un grupo de colombianos y ciudadanos de México encargados de organizar una inminente descarga de cocaína. Esta operación de trasvase se iba a realizar desde un buque "nodriza", que había partido de Venezuela, a otro barco controlado por un grupo de narcotransportistas gallegos afincados en la zona de la localidad coruñesa de Boiro. El grupo está integrado, supuestamente, por "conocidos y experimentados" traficantes vinculados a este tipo de operaciones marítimas; y su especialidad consiste en recibir la droga del Atlántico y transportarla hasta las proximidades de las costas gallegas donde planchas "planeadoras" recogen la cocaína para alijarla en tierra. Las investigaciones apuntaban a que el trasvase se iba a producir en un punto situado al oeste de las Islas Azores por lo que se envió hasta la zona un buque del Centro de Inteligencia contra el Crimen Organizado, además de otros efectivos. Una vez que el barco "nodriza" fue avistado por los agentes del GEO, realizaron un abordaje a pesar de que las condiciones meteorológicas eran malas. Material intervenido Además de la droga intervenida y de las mencionadas detenciones, agentes de la Policía Nacional se incautaron de 20.000 euros, de varios vehículos y teléfonos móviles. La embarcación llegará al puerto de Vigo a finales de esta semana. Además, la operación continúa abierta por lo que no se descartan nuevas detenciones en relación con esta operación.