Detenidos en Betanzos el falso oficiante de una boda y el novio, que ya estaba casado

Agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Betanzos, en A Coruña, detuvieron a dos hombres que supuestamente falsearon una boda, uno actuando como oficiante de la ceremonia y otro en su "papel de novio". Como consecuencia de esta actuación, se les imputan varios hechos delictivos, de usurpación de funciones y estafa, entre otros. Según informaron fuentes de este cuerpo de seguridad, los hechos se desencadenaron cuando la novia, ajena a la trama, se enteró del fraude al regreso de la luna de miel, en la que habían ido a la isla de Tenerife. El supuesto enlace se celebró en la presencia de medio centenar de invitados de la pareja y tuvo lugar en un local social de la comarca de Betanzos. El oficiante, un vecino de la localidad coruñes de Abegondo, de 51 años de edad y tractorista de profesión "tuvo su día de gloria" haciéndose pasar por la autoridad para llevar a cabo los esponsales. Las mismas fuentes apuntaron que "el cargo le duró poco", ya que dos semanas más tarde fue detenido por la Guardia Civil, acusado de un delito de usurpación de funciones. "Aparentemente una historia normal, de personas normales", recoge el mismo comunicado, pero el problema "surge" cuando alguien le comunica a la recién casada que su supuesto marido "está casado, separado pero no divorciado", y por lo tanto el vínculo matrimonial anterior de este hombre sigue tendiendo vigencia legal. De este modo, agentes de este cuerpo de seguridad iniciaron una investigación que concluyó con la detención del "marido de pega", F.J.C.V., de 35 años de edad, natural del municipio coruñés de Miño y que fue acusado de supuestos delitos de estafa, falsedad y contra las relaciones familiares. El ahora detenido, había conseguido que su esposa ficticia le incluyese en sus cuentas bancarias con las "consabidas consecuencias y ventajas para el impostor". El hombre, cuenta con varios antecedentes policiales por engaños y estafas. Las fotos, el vídeo, el viaje de novios y el propio convite para familiares y amigos constituyen algunos de los gastos que ahora el juez debe determinar cómo se afrontan, aunque algunos de ellos ya habían sido abonados por la víctima del fraude. Asimismo, los agentes continúan la investigación, ya que los testigos aportados por parte del novio y que firmaron el documento ante el tractorista pudieron haber cometido algún supuesto delictivo, puesto que algunos eran "familiares muy próximos que supuestamente tenían que conocer la situación del novio".