RÍA DA ESTRELA
Todo preparado para la Semana Santa en la Ría da Estrela
REDACCIÓN | Dicen que “al mal tiempo buena cara”. Y así se han preparado en la Ría da Estrela para recibir a los visitantes de Semana Santa. Aquellos que buscan historia, entorno, gastronomía, lo encontrarán en esta Ruta que aúna los concellos de Lousame, Muros, Noia, Porto do Son y Outes.
Todo está preparado en la Ría da Estrela para recibir la Semana Santa en la que la meteorología no es excusa. Empezando por pasear por la historia de alguna de sus villas: Muros, marinera y sobria, donde por sus calles medievales aún se respira ese olor a sal. Noia, Portus Apostoli, ciudad con un eminente carácter histórico y señorial. Qué decir de Outes, enigmática con sus petroglifos y otros elementos megalíticos de inestimable valor, que es una visita obligada junto con su ruta a pie o virtual de los Carpinteros que muestra su pasado vinculado a pequeños astilleros y aserraderos. Lousame, testigo de un pasado industrial que convirtió a la Ría en un punto de partida sólido y que hoy conserva ese legado como un tesoro. En este punto animamos a visitar el Museo Minero de San Finx (interesados llamar al tel. 981 820 499). Porto do Son, asomado al mar mucho antes de que las historias se plasmaran en papel para contar todo su legado natural y verde que culmina en Castro Baroña, cuya visita es necesaria para entender la Ría da Estrela, además cuenta con un centro de interpretación, situado un edificio singular del siglo XIX (antiguo concello) del centro histórico de esta villa marinera.
Siguiendo la huella del pasado histórico que transcurre por la Ría da Estrela es visita obligada el Puente de Nafonso y el estuario del río Tambre, que también nos conducirá hasta su Central Hidroeléctrica.
Para aquellos que tengan tiempo para visitar museos, no se pueden perder el Centro de Interpretación de los Molinos "Pozo do Cachón", uno de los mayores molinos de mareas de España, construido en el s. XIX y situado en Muros (hay que reservar previamente en el Ayuntamiento). Pero vale la pena esta visita por su localización extraordinaria y porque esta enorme construcción aprovecha el movimiento de las mareas en para su funcionamiento. También destaca el Museo Marea, ubicado en el Centro Histórico de Ponto do Son, está dedicado a recoger, investigar y transmitir la memoria de la gente del mar.
Todo ello aderezado de una gastronomía local, de kilómetro 0, que no dejará indiferente al visitante. Además de las diferentes villas se recomienda la visita al Porto do Freixo por diversos motivos: Su ribera es con frecuencia un hervidero de gente que se levanta muy temprano para dedicarse a la extracción del famoso berberecho de esta ría, entre otros. Pero además de embarcaciones de pesca y la lonja, en este puerto encontrarás un buen número de restaurantes y mesones donde degustar un producto obtenido a tan solo unos centenares de metros con los que su calidad inicial se reafirma con su indiscutible frescura. Departamento de comunicación