El servicio de Pediatría del Hospital Provincial de Pontevedra, al borde del colapso

Los pediatras reclaman la intervención urgente de la consellería de Sanidade

El servicio de Pediatría del Complejo Hospitalario de Pontevedra, ubicado en las instalaciones del Hospital Provincial, se encuentra al borde del colapso debido al fuerte aumento de ingresos de niños aquejados de diversas dolencias relacionadas con la época invernal, a lo que se suma el conflicto abierto entre el colectivo de pediatras y la gerencia del complejo. Este martes por la mañana apenas quedaba una cama libre debido a los más de treinta ingresos, y sin embargo, cada vez están en activo menos pediatras. La plantilla de médicos está bajo mínimos ya que de los quince pediatras que habitualmente cubren este servicio, tan sólo cinco están trabajando, los demás se encuentran de baja. Según denunció el portavoz de este colectivo, el doctor Agustín Romay "la situación aún puede empeorar porque dos médicos más están al borde de la baja", debido a la tensión que les supone la sobrecarga de trabajo por la acumulación de guardias que deben afrontar los pocos pediatras que están de servicio. Los pediatras sostienen que la situación es insostenible, en contra de la opinión de la Conselleira de Sanidad, María José Rubio quien cerró filas con la gerente apoyando la decisión de suspender la exención de guardias, una situación de la que se venían beneficiando los pediatras mayores de 55 años, y calificando esta situación de "puntual y transitoria". "La situación no es ni puntual ni transitoria, ya que no se arreglaría aunque de repetente volvieran al trabajo todos los pediatras que ahora se encuentran de baja porque sólo hay siete médicos para hacer las guardias", explicó el doctor Romay. "Esta situación supone largas jornadas de trabajo incompatibles con la salud, con la familia y con una óptima prestación médica". Pero sin duda, lo que más ha molestado a los pediatras pontevedreses ha sido la referencia de la conselleira de Sanidade a que la seguridad y asistencia sanitaria de los niños es innegociable, por encima de los derechos de los médicos. "La conselleira que no tiene derecho a decir eso, merecemos otro trato porque llevamos muchos años haciendo nuestro trabajo y dedicándonos correctamente a los niños". Los pediatras del Hospital Provincial insisten en que la administración autonómica tiene que resolver este grave problema asistencial, porque en la actualidad "es inviable y se sigue deteriorando a marchas forzadas".