Lo que parece imposible de conseguir con perseverancia se puede alcanzar. Todo es posible es una forma de expresar que las personas si ponemos empeño, ganas, esfuerzo e ilusión podemos lograr cosas que parecían a priori casi imposibles. Nadie vivirá por otra persona y cada individuo tiene perfecto derecho a vivir su vida como quiera, ya que al morir cada individuo quiere estar satisfecho con la libertad con la que ha realizado su propio existir en el mundo. El tipo de existencia que crea cada sujeto es tan válido como el configurado por otro cualquiera.
Sacar lo mejor de uno mismo es algo perfectamente racional y coherente. También es cierto que la frase se puede interpretar de infinidad de formas. Aunque, a mi juicio, la explicación mejor es decir que el desarrollo de los talentos o las capacidades que cada uno posee es lo más deseable.
Realizar lo que apasiona y gusta es algo impagable y da fuerzas y energías redobladas para no desfallecer ante los obstáculos, la indiferencia, los inconvenientes, la injusticia, la incomprensión y la ignorancia. Y perder el miedo a equivocarse es una de las condiciones para lograr metas más altas cada vez.
Esforzarse al máximo es una de las estrategias para superar con éxito la falta de apoyo y la marginación. Logrando sobresalir por los méritos y logros objetivos acumulados a lo largo del tiempo. Cada persona debe ser lo que quiere ser y el paso del tiempo establece la verdad de las cosas.
También es indudable que el realismo debe presidir las conductas humanas, en mi opinión, porque ser demasiado exigente con uno mismo tampoco es positivo. Pero un cierto nivel de autosuperación y de ambición siempre es beneficioso y va unido a una sensación de logro que retroalimenta el seguir en la brecha, por ejemplo, escribiendo o creando.
Las capacidades y el rendimiento de las personas son algo relativo y no absoluto. Pero está claro que la tenacidad, la perseverancia y la constancia hacen que los esfuerzos den más resultados de lo que a primera vista pudiera pensarse. Y nadie sabe realmente lo que es capaz de hacer hasta que lo intenta con fuerza y energía.
También se puede adoptar en la vida una actitud de conformismo y no querer vivir más que desde una perspectiva exclusivamente hedonista y consumista pensando en la brevedad de la existencia. Creyendo que es la mejor y auténtica vida frente a otros modelos existenciales posibles. Estoy convencido de que salir de la zona de confort de cada uno es algo muy positivo, porque lo fácil es dejarse llevar por la realidad.
En cambio, lo difícil y a la vez lo más apasionante es ser dueños de nuestra propia vida y dirigirla con plena libertad hacia donde queremos. Los demás o el entorno no tienen que inmiscuirse en las decisiones de cada persona, con críticas o descalificaciones basadas en la ignorancia de las intenciones profundas y razones de cada ser humano.
De todos modos, somos más capaces de lo que creemos. Y esto conviene ponerlo de manifiesto. Y lo que se echa en falta en la sociedad actual es una mayor consideración a la labor de los escritores y creadores que no surge de la nada, sino de la apasionada dedicación a lo que les gusta y que se merece, sin ninguna duda, un reconocimiento objetivo.
José Manuel López García