ENTREVISTA | MANUEL COLLADO
Manuel Collado: "El personal científico hospitalario en Galicia está maltratado"
Licenciado en Biología Molecular y Bioquímica, dice que las condiciones laborales de los investigadores son deplorables
ÁNGEL VARELA | Manuel Collado, licenciado en Biología Molecular y Bioquímica por la UAM de Madrid, doctor por esa misma universidad en 1997 y con estudios postdoctorales en Londres y Nueva York habla sobre la delicada situación que, en su opinión, atraviesan muchos profesionales en el ámbito hospitalario gallego.
.- Pregunta: ¿Cuál es, en su opinión, la situación en la que se encuentran actualmente muchos profesionales en el ámbito hospitalario gallego?
.- Respuesta: El personal científico hospitalario en Galicia está totalmente maltratado, despreciado y abandonado. El personal hospitalario con labores exclusivamente investigadoras sufre condiciones laborales deplorables y precarias entre las cuales la más grave es quizá la falta de estabilidad.
.- P: ¿Cuál fue exactamente el problema que surgió con la Consellería de Sanidade y el programa Miguel Servet?
.- R: El programa Miguel Servet es un programa estatal que pretende la incorporación de científicos de gran nivel a Institutos de Investigación Sanitaria (IIS) para potenciar la investigación científica de calidad en el ámbito hospitalario. Los hospitales españoles sufren una clara carencia de investigación de calidad y el ISCIII, el organismo estatal que gestiona la ciencia biomédica hospitalaria, ideó este programa como herramienta clave para aumentar la masa crítica de investigadores en los hospitales. Este programa, junto con la acreditación de IIS por parte del ISCIII para favorecer la creación de institutos resultado de la colaboración entre los servicios de sanidad y las universidades locales, son el pilar sobre el que se asienta la investigación sanitaria.
El programa se sustentaba en la convocatoria y evaluación de los mejores investigadores biomédicos para apoyar su contratación a cargo de los servicios de salud autonómicos, con el objetivo final expreso de que esos investigadores fuesen, al concluir el programa, incorporados de manera estable al sistema. En el caso de Galicia, el SERGAS ha ido contratando investigadores MS a los que, culminado el programa, ha mantenido mediante concatenación de contratos temporales por obra y servicio que no superan los 2 años, en una fórmula de 1+1 años. La renovación es discrecional y con criterios opacos, y se realiza en el último momento al concluir el contrato vigente.
Además de suponer unas condiciones laborales absolutamente denigrantes y humillantes que no responden al nivel de los investigadores, su esfuerzo y sus labores, la situación en la que nos deja nos impide realizar plenamente nuestra labor.
Los investigadores MS son líderes de grupos de investigación que crearon con su incorporación de manera independiente, con prácticamente nulo apoyo ni ayuda, mediante la consecución de amplios recursos económicos y reclutando personal en convocatorias competitivas. Los investigadores MS son los más cualificados del ámbito sanitario, son sometidos constantemente a rigurosas evaluaciones que deben superar y procuran sus propias fuentes de financiación y de personal. Todo esto se hace sin apoyo institucional y en un marco laboral penoso que ni siquiera garantiza nuestra estabilidad.
Esta situación nos impide, por ejemplo, participar en convocatorias de búsqueda de fondos de investigación o de recursos humanos, puesto que es difícil confiar en investigadores que no pueden garantizar su contratación a largo plazo.
Competimos frente a investigadores estables en el estado y frente a nuestros colegas en el ámbito internacional en donde no pueden incluso creerse que nuestra contratación sea tan precaria.
.- P: ¿La situación de los investigadores sanitarios en Galicia es mejor o peor que en otras comunidades del Estado?
.- R: No puedo comentar con fundamento esa pregunta, pero puedo asegurar que estamos a la cola porque no hay ningún aspecto positivo en nuestra situación. Sé que existen comunidades en donde han planteado una contratación estable de sus investigadores MS, como por ejemplo País Vasco, Andalucía, etc. Pero la inestabilidad es un asunto bastante general.
.- P: ¿Situaciones como la que denuncian contribuyen a poner de manifiesto que en nuestro país, y no sólo en el ámbito sanitario, se tiende incomprensiblemente a despreciar el talento?
.- R: Nuestra situación causa frustración, preocupación, angustia, etc, de manera innecesaria e injusta. No podemos trabajar dignamente sometidos a la presión constante de no tener ninguna garantía de nuestra situación laboral a la siguiente semana. No nos permite además realizar nuestra labor plenamente, puesto que no podemos acceder a todas las convocatorias de financiación o de recursos humanos.
.- P: ¿Qué medidas habría que adoptar para poner realmente en valor todo lo que aportan los investigadores sanitarios al sistema?
.- R: Deberíamos tener un plan de carrera profesional concreto, claro, bien definido, que establezca el modo en el que se accede a él, cómo se progresa, y qué etapas tenemos por delante. Cómo (y quién) evalúa a los científicos, qué se espera de nosotros y qué recibimos a cambio. Simplemente que exista una carrera profesional clara y que ofrezca estabilidad y seguridad.
.- P: ¿No resulta incomprensible que, en un momento como el que vivimos con el Covid 19, se produzcan situaciones como la que denuncian?
.- R: La situación que vivimos con la COVID-19 ha permitido sacar a la luz las condiciones en las que desarrollamos nuestra actividad científicos y personal sanitario. Hoy estamos reconociendo el valor de la ciencia como solución al problema y esperamos de nuestros científicos sus aportaciones para mejorar la situación. Por eso creo que es un buen momento para que la sociedad conozca las condiciones en las que tenemos que desarrollar nuestra labor.
A estas condiciones penosas de contratación hay que añadir también la tradicional falta de recursos económicos para investigación, que lleva años de recortes sucesivos hasta dejar la ciencia en España en condiciones de miseria. Y una burocracia rampante que dificulta hasta extremos absurdos nuestra actividad. En el caso gallego, en particular, la inversión en ciencia está a la cola del estado, disfrazada además de ayudas a empresas de base tecnológica. La financiación de investigación sanitaria en Galicia es totalmente inexistente. Acudimos a fuentes de financiación estatales, privadas o europeas.
Confío en que la sociedad sea consciente de ello, valore nuestra actividad y exija de los políticos soluciones adecuadas.