EFE | El
Gobierno británico anunció este martes la creación de un nuevo Centro
de Operaciones Fronterizas que vigilará la entrada y salida de personas y
mercancías de los puertos del Reino Unido tras el final del periodo de
transición del Brexit. Esta unidad funcionará las veinticuatro horas del día y estará pendiente
de los problemas en la frontera británica, a fin de minimizar problemas
en el flujo de movimiento durante las primeras semanas a partir del 1
de enero de 2021, cuando habrá terminado el actual periodo de transición
con la Unión Europea (UE).
El Gobierno hizo este anuncio mientras continúan las
negociaciones entre Londres y Bruselas para intentar alcanzar un acuerdo
sobre su futura relación comercial a partir del 1 de enero, cuando el
Reino Unido -que salió de la UE el pasado 31 de enero- se desconectará
definitivamente del bloque comunitario al abandonar el mercado único y
la unión aduanera.
El ministro británico del Gabinete, Michael Gove, señaló hoy en una nota que, "al final del año recuperaremos el control de
nuestras fronteras y por eso hemos creado el nuevo Centro de Operaciones
Fronterizas para vigilar y analizar los flujos de mercancías y personas
en el Reino Unido en tiempo real".
"Esto nos ayudará a enfrentar los desafíos de manera rápida y
decisiva, y nos brindará más información que nos hará más seguros",
subrayó.
Mientras tanto, el nuevo sistema de inmigración del Reino Unido,
por puntos y similar al australiano, empieza a funcionar este martes en
forma virtual, indicó el Gobierno.
A partir de este martes, todos los extranjeros, incluidos los
ciudadanos comunitarios, que quieran trabajar en el Reino Unido a partir
del próximo 1 de enero tendrán que solicitar un visado.
Los extranjeros que soliciten este documento como trabajador
cualificado necesitarán contar con una oferta de trabajo, hablar inglés y
ganar al menos 25.600 libras (28.544 euros) brutas anuales.
El coste de solicitar ese visado, que varía en función del tipo
de trabajo, está estimado entre 610 libras (680 euros) y 1.408 libras
(1.569 euros), y los solicitantes tendrán que esperar unas tres semanas
para conocer si se le ha concedido.
Los ciudadanos de la UE y sus familias que viven en el Reino
Unido tienen plazo hasta el 30 de junio de 2021 para solicitar el
estatus de asentado a fin de seguir residiendo legalmente.