EFE | La
Unión Europea (UE) y el Reino Unido acordaron hoy seguir
negociando el acuerdo sobre su futura relación antes de que acabe el
año, incumpliendo otra fecha límite más en las conversaciones del
Brexit. La decisión la tomaron la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula
Von der Leyen, y el primer ministro británico, Boris Johnson, en una
conversación telefónica que mantuvieron hoy y que duró veinte minutos
"aproximadamente", según fuentes comunitarias.
Ambos mandatarios mostraron su pesimismo durante esta semana sobre
las posibilidades de alcanzar un acuerdo y se dieron de plazo hasta hoy para decidir sobre el futuro de las negociaciones.
"A pesar del agotamiento después de casi un año de negociaciones, a
pesar de que los plazos se han incumplido una y otra vez, creemos que es
responsable, en este momento, hacer un esfuerzo adicional", afirmó la
jefa del Ejecutivo comunitario, en declaraciones a la prensa, tras su
conversación con Johnson.
Desde que el Reino Unido celebrase el referéndum sobre el Brexit en
2016, la fecha para su salida de la UE se fue posponiendo en varias
ocasiones.
Si inicialmente se tendría que haber formalizado el 29 de marzo de 2019, se acabó produciendo el 31 de enero de 2020. Desde entonces, el Reino Unido ya no es un Estado miembro de la UE
pero Bruselas y Londres se dieron un plazo de transición que finaliza el
próximo 31 de diciembre. Por eso deben alcanzar un acuerdo antes del 1 de enero, si no
quieren que su relación comercial se rija por las normas de la
Organización Mundial del Comercio (OMC), que prevén aranceles a las
exportaciones e importaciones.
"Hemos encomendado a nuestros negociadores que continúen las
conversaciones y ver si se puede llegar a un acuerdo, incluso en esta
última etapa", dijo Von der Leyen.
El negociador europeo, Michel Barnier, y el británico, David Frost
continuaron negociando hoy en Bruselas después de la
conversación entre sus jefes, aseguraron las citadas fuentes. La presidenta de la CE aseguró que la conversación telefónica con
Johnson fue "constructiva y útil" y que hablaron sobre "todos los temas
sin resolver". Estos asuntos que siguen encallados son el de la pesca, la
competencia justa entre las empresas británicas y europeas y el
mecanismo de resolución de conflictos sobre el posible pacto.
Medidas de contingencia
Ante la posibilidad de que el acuerdo no sea posible pese a los
esfuerzos de última hora, Bruselas continuará la semana que viene con
los preparativos para aprobar las medidas de contingencia que presentó
el jueves pasado. Estos planes pretenden minimizar el impacto de un Brexit a las bravas
a partir del 1 de enero, en ámbitos como el sector pesquero, las
conexiones y la seguridad aérea y el tráfico rodado.
Desde Londres, el gobierno británico movilizó cuatro barcos militares
que patrullarían las aguas territoriales para evitar posibles
incursiones de pescadores comunitarios a partir del 1 de enero -entre
otras medidas de contingencia-, si el acuerdo no se alcanzase. Sobre la posibilidad de que Bruselas y Londres no alcancen un acuerdo
habló también hoy la ministra de Exteriores española, Arancha González
Laya, en una entrevista en el canal británico, Sky News.
"En las circunstancias actuales" de pandemia "sería muy negativo" para las economías, dijo la jefa de la diplomacia española. El tiempo para que la UE y el Reino Unido alcancen un acuerdo
apremia, pero ello no impide que haya cierta ironía en Bruselas sobre
unas negociaciones que se alargan ya más de tres años. Después de escuchar a Von der Leyen, el portavoz de la presidencia
alemana ante la UE, Sebastian Fischer, bromeó hoy en su cuenta de
Twitter sobre una supuesta conversación telefónica con su madre.
"Cuando mi madre llama, generalmente finge estar interesada en mi
trabajo y pregunta por el Brexit", dijo Fischer, y diciendo que cuando
le explica a su madre que "el Brexit sigue siendo un lío, pero los
siguientes días serán decisivos", ella "suspira y cambia de tema".