EFE | El
ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha subrayado hoy que España
ha manejado la segunda ola "con un acierto razonable", aunque ha sido
"dura", y ha hecho hincapié en que afrontamos semanas "muy críticas" por
la llegada de las Navidades, periodo en el que ha pedido a la
ciudadanía "que se quede en casa".
De esta forma se ha expresado Illa en un vídeo proyectado durante la
clausura de la octava edición de la Jornada Somos Pacientes, que cada
año impulsa la Fundación Farmaindustria y la comunidad virtual Somos
Pacientes, que en esta ocasión han abordado el futuro del movimiento
asociativo y las lecciones que ha dejado la pandemia.
El ministro ha querido poner de manifiesto el "importante papel"
y la profesionalidad de las organizaciones de pacientes, a las que ha
agradecido su trabajo de forma continuada especialmente durante la
pandemia, al estar al lado de la gente y "cuidando el aspecto mas
humano" de la sanidad, para que "la gente no se sienta sola".
Ha resaltado algunas lecciones aprendidas durante la pandemia,
como la humildad, ya que hay muchas cosas del coronavirus que aún se
desconocen, con lo que hay que seguir aprendiendo y adaptando las
medidas a las nuevas informaciones científicas.
También ha destacado que hay que ser "muy cautos y prudentes a
la hora de afrontar las cosas que nos vienen por delante" y ha insistido
en que hay que poner a la persona en el centro del sistema y en eso, ha
dicho, han ayudado "mucho" las organizaciones de pacientes.
"El sistema sanitario español ha funcionado razonablemente
bien", a juicio de Illa, quien no obstante ha dicho que hay evaluar y
mejorar.
El ministro ha querido lanzar de nuevo un mensaje sobre la
situación actual de la pandemia y es que esta segunda ola "ha sido dura"
y en España llegó antes: "La hemos manejado con un acierto razonable,
pero esto no está ganado y afrontamos unas semanas muy críticas".
El inicio de las fiestas navideñas, ha concretado el titular de
Sanidad, es una etapa del calendario "muy especial", en la que aumenta
mucho la movilidad y los contactos sociales.
Y aunque se ha mostrado contento de que entre todas las
comunidades se haya acordado un plan de Navidad que restringe la
movilidad, ha querido lanzar un mensaje "muy claro" y es que "nos
quedemos en casa estas Navidades, que restrinjamos los contactos a los
círculos familiares más íntimos".
A las organizaciones de pacientes les ha dicho que le gustaría
que le ayudaran a difundir este mensaje porque estamos a las puertas del
invierno, ya que "nos ha costado mucho volver a vencer esta segunda
ola".
Si bien ha indicado que la incidencia acumulada está en torno a
los 180 y 190 casos por cada 100.000 habitantes, "todavía queda mucho
camino por recorrer".