SANTIAGO DE COMPOSTELA | El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, animó hoy a
preservar la obra y los valores de Rosalía de Castro, la escritora
gallega más universal y símbolo “de la Galicia que somos”. “Galicia
es rosaliana porque Rosalía nos hizo tomar conciencia de nuestra
tierra, de la importancia de nuestro pueblo y de la relevancia de tener
una cultura y "unha fala do noso". Su obra fue la semilla del bosque
fértil que es nuestra lengua”, recordó, incidiendo en que la autora
entendió además que, nuestra lengua no nos encierra ni nos limita, sino
que nos proyecta y, a través de ella, podemos construir una identidad
abierta y que no conoce fronteras.
“Rosalía de Castro demostró que
hay gestas que no se construyen sobre poderlo político o militar, sino
sobre lo siempre inabarcable poder de la palabra”, abundó, haciendo
hincapié en que la semilla que ella plantó dio sus frutos a través de
las obras de los muchos autores que conforman nuestra literatura y que
homenajeamos cada 17 de mayo, en el Día de las Letras Gallegas, que se
corresponde con la fecha de publicación de Cantares Gallegos.
En
esa línea, el responsable del Gobierno gallego aseguró que esa semilla
también floreció de forma extraordinaria en la tierra fértil de nuestro
autogobierno, gracias a lo que la lengua gallega recuperó el papel que
le correspondía. “En la Galicia contemporánea la visión de Rosalía
pervive en muchos ámbitos: en el interese que en los gallegos de hoy
sigue despertando su obra; en los centros de enseñanza, donde se estudia
su contribución a nuestra literatura; o en las instituciones gallegas
-como este Parlamento-, en las que nuestra lengua no volverá a vivir
tiempos oscuros”, abundó.
Feijóo concluyó aseverando que, mientras
otros emplean la lengua como instrumento de confrontación, Galicia es
un ejemplo de convivencia lingüística. No en vano, el gallego es la
lengua con los índices de competencia más elevados de las comunidades
con lenguas cooficiales.
El presidente de la Xunta concluyó
recordando que el gallego es nuestra más grande creación colectiva como
pueblo y apeló al consenso de todos para que siga siendo una lengua
viva.