BALONMANO FEMENINO
El Guardés golpea primero ante el VZV (37-22)
REDACCIÓN | Casi medio año después de la última vez, el Mecalia Atlético Guardés volvió a sentir el fuego del infierno. De su infierno. El debut en la Copa Europea de esta temporada sirvió para que el equipo miñoto estrenase también la reforma del pabellón de A Sangriña. Sirvió para celebrar la vuelta a casa. Y por todo lo alto. Porque las pupilas de Abel González cuajaron su mejor partido de la temporada, batieron al JuRo Unirek VZV por quince tantos de diferencia y dieron el primer paso para superar la tercera ronda de la competición continental en un partido de vuelta que se define este mismo domingo, de nuevo en el flamante recinto de A Guarda.
El Mecalia fue superior desde el minuto 1 al 60 y no dejó escapar la opción de culminar la fiesta del regreso con una victoria que le acerca a la siguiente ronda. El equipo neerlandés lo intentó, pero se vio superado por unas jugadoras locales que volaban. La fiesta previa, con partidos de niños y niñas de la base del club y actuaciones del grupo de baile Dansá, tuvo su respuesta en la pista con un inicio que dejaba clara la idea del Guardés: golpear primero, golpear fuerte y seguir golpeando después.
Desde la dirección de Patrícia Lima, el conjunto miñoto fluyó en ataque con la electricidad de Pauli Fernández y el devastador poder destructivo de Sandra Santiago, que se fue a la decena de goles. Imparables. En defensa, un 6:0 profundo y agresivo limitaba el poderío en el lanzamiento exterior de las jugadoras visitantes, que con una media de 1,80, apostaban por la fuerza tanto en ataque como en defensa.
Así, el conjunto miñoto sacó el rodillo para establecer un demoledor parcial de 14-2 al cuarto de hora de encuentro. La velocidad ofensiva y defensiva marcaba las diferencias y el equipo holandés se veía desarbolado. Con el carrusel de cambios de Abel González, las visitantes apretaron, pero no fueron capaces de bajar esa diferencia de doce tantos, que se mantuvo al descanso (22-10).
A la vuelta del vestuario, la tónica apenas cambió. Míriam Sempere compareció en la portería en lugar de una Marisol Carratú que había anotado de portería a portería. El caso es que el Guardés seguía corriendo y martilleando la portería de una Van Stralen, que pese a todo, estaba siendo la mejor jugadora de su equipo.
Pese a alguna fase de pequeñas relajaciones, el equipo local, que disfrutó con el regreso a la pista de Carolina Silva, no se dejó ir y mantuvo la tensión competitiva hasta el final. Gracias a ella, consiguió un magnífico resultado que debe hacer valer en la tarde de este mismo domingo, cuando se vuelva a enfrentar a la escuadra neerlandesa en el encuentro de vuelta de esta tercera ronda de la Copa Europea.