Galicia dispone de cinco nuevos radares móviles en vías secundarias para reducir la mortalidad un 25%

Rubalcaba dice en Santiago que las transferencias de tráfico se estudiarán "llegado el momento"

La comunidad gallega contará desde este jueves con cinco nuevos radares móviles para controlar la velocidad de los vehículos en las carreteras secundarias y 2.000 etilómetros para realizar pruebas de alcoholemia a los conductores. Este incremento de medios materiales se contempla en el Plan Especial de Seguridad Vial para Galicia 2006-2010, con el que se pretende reducir el número de fallecidos por accidente de tráfico en un 25 por ciento. Aparte de una mayor dotación de medios humanos, el programa incluye la instalación de ocho nuevos radares fijos a finales de año que se irán rotando en 18 cabinas, siete de ellas en A Coruña, tres en Lugo, tres en Ourense, y cinco en Pontevedra. Los radares móviles se destinarán uno a cada provincia, más otro de apoyo para toda la comunidad. El plan fue presentado en Santiago por el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, y el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien aseguró que pese a las elevadas cifras de siniestralidad vial en la comunidad "no hay una maldición a Galicia en este tema, sino razones objetivas que se pueden mejorar". Como incidencias especiales de la siniestralidad en las carreteras gallegas destacó la juventud, la nocturnidad, y los peatones. Además, Galicia presenta una mayor accidentalidad en las carreteras secundarias y comparte con el resto de España el factor de la elevada velocidad. Campaña especial de vigilancia Por eso la Dirección General de Tráfico pondrá en marcha una campaña especial entre el 7 y el 20 de agosto para concienciar a los conductores sobre el exceso de velocidad. Bajo el lema de "En carreteras de doble sentido, doble precaución" se duplicarán los controles para verificar la velocidad de unos 100.000 vehículos y 1,1 millones de conductores. Además, el Gobierno central "copiará", dijo Rubalcaba, para el resto de España el plan de seguridad vial gallego porque se trata de la "primera y gran medida" contra los accidentes. Sin embargo, la campaña de vigilancia sobre la seguridad no se aplicará en las comunidades de Cataluña y País Vasco, que tienen transferidas las competencias en tráfico. Rubalcaba descartó abordar la posibilidad de que Galicia pueda contar en un futuro con las transferencias en tráfico y seguridad vial que reclama la Xunta. Dijo que será "llegado el momento cuando se discutirá quién lo puede hacer mejor" en esta materia, si la Administración central o la autonómica. Añadió que "ésa sería la discusión pertinente", aunque no quiso pronunciarse sobre la disposición del Gobierno a transferir las competencias. Dejó la cuestión para más adelante porque "cada momento tiene su afán" manifestó, utilizando una cita que él mismo recordó como "evangélica". Por su parte, el presidente de la Xunta destacó la "solidaridad plena y total" con el Estado en la lucha contra la siniestralidad vial y aseguró que "vamos a ganar esta batalla". Considera que, por primera vez, la Xunta está comprometida realmente con este objetivo, ya que el PP "no sé si nos dejó muchos planes porque no los encontramos, pero sí muchos menos euros" que los que presupuesta el Gobierno bipartito. Al igual que Rubalcaba, advirtió que el problema de la siniestralidad en las carreteras "no se resuelve ni en un día, ni con una sola medida" pero afirmó que "seremos tenaces" en la lucha contra esta problemática, especialmente intensa en Galicia. Carreteras secundarias El Plan de Seguridad Vial para Galicia tendrá una especial incidencia en las carreteras secundarias, ya que en estas vías se concentran los accidentes de tráfico y los fallecidos en porcentaje superior a la media del Estado. Así, la Guardia Civil de Tráfico incrementará la vigilancia, los controles de velocidad y de alcoholemia. En estas tareas, sobre todo en servicio a los conductores, colaborarán con Tráfico las Unidades de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil, realizando controles de alcoholemia y también del uso del cinturón de seguridad, el casco, y la no utilización del móvil durante la conducción. Por otra parte, con motivo de su presencia en Galicia y en respuesta a las preguntas de los periodistas, el ministro del Interior informó de que "no hay resultados concretos" sobre los autores de la colocación de artefactos explosivos en diversas obras de infraestructuras gallegas esta verano, y las investigaciones a este respecto "continuan".