Detenido el supuesto autor del incendio de Cerdedo, acusado de provocar 93 fuegos desde 2002

El fuego vuelve a amenazar el entorno de Santiago

La Guardia Civil detuvo al vecino de la localidad pontevedresa de Cerdedo Serafín Pardiñas, de 52 años de edad, por provocar supuestamente 93 incendios forestales desde el año 2002 hasta el 6 de agosto del 2006, entre ellos el que este verano causó la muerte a tres personas. Lo paradójico de este caso es que el arrestado había denunciado el pasado 7 de agosto a un vecino como autor de varios incendios, que precisamente ahora se le imputan a él. La Guardia Civil detuviera en aquella ocasión a Adolfo José Seijas Silva, que tras prestar declaración quedó puesto en libertad sin cargos. Los vecinos de la parroquia de Quireza se mostraron en todo momento a favor del acusado y en contra del denunciante, al que acusaban de "borracho y pirónamo". Días después, el ahora arrestado salía en varios medios de comunicación reconociendo que su vecino no había sido el incendiario pero que "me molestaba por las noches". El ahora detenido nunca quiso responder sobre la autoría de uno de los incendios más devastadores que sufrió la comunidad gallega, que comenzó en Cerdedo y llegó casi hasta la misma ciudad de Pontevedra, cobrándose tres vidas por el camino, la de las dos mujeres que viajaban en su coche hacia Vigo y la del vecino de Campo Lameiro que no pudo soportar el calor de las llamas. A Serafín Pardiñas se le imputan además de éste, otros 92 incendios desde el 2002 en las parroquias de Quireza, Santaballa do Castro y Pedre, todas del Concello de Cerdedo, uno de los más afectados durante la ola de incendios de la primera quincena de agosto. Serafín vivía en condiciones infrahumanas, subsistiendo con una paga de beneficiencia. Los vecinos le temían por su mal humor y le acusaban de haber quemado el monte "en varias ocasiones". Los agentes de la Benemérita pusieron al detenido a disposición judicial a la espera de que el juez dictamine si ingresa en prisión o queda en libertad. Nuevos incendios Las altas temperaturas despertaron de nuevo las llamas en los montes gallegos. Hasta once incendios se registraban a última hora del jueves, los más graves en los concellos de Coristanco y Santiago. La capital gallega volvió a estar cercada por las llamas, con tres incendios en San Marcos, Boqueixón y San Xoán de Flecha. Unos fuegos provocados, en opinión del alcalde compostelano, Xosé Sánchez Bugallo, que ha ordenado activar de nuevo el mismo operativo de extinción que funcionaba a principios de agosto. El incendio que afecta a la parroquia compostelana de Fecha dispone de un considerable dispositivo que trabaja en las labores para sofocar las llamas. Al lugar se trasladaron un agente, seis brigadas -42 efectivos- cuatro motobombas, cuatro helicópteros y un medio aéreo. Los otros dos focos sin control, según los datos de la Consellería de Medio Rural, se localizaban en el municipio lucense de Quiroga y en el ourensano de Cualedro. En Santiago, otro incendio ya controlado a última hora, afectó a la parroquia de Bando, en las cercanías de San Marcos, donde permanecían destacados un agente, cuatro brigadas -28 efectivos-, tres motobombas y seis helicópteros. El fuego se acercó al Asilo San Marcos, que sin embargo no tuvo que ser desalojado. La mayor preocupación se centraba en Quiroga y Santiago donde se iniciaron dos fuegos a las 15.25 y las 17.50 horas. En el caso del municipio lucense, la parroquia de Paradaseca cuenta con un amplio dispositivo de extinción, integrado por un técnico, un agente forestal, diez brigadas -es decir, 70 efectivos del Servizo de Defensa Contra Incendios Forestais-, seis motobombas, ocho helicópteros y diez hidroaviones. En cuanto al municipio ourensano de Cualedro, tres agentes forestales, tres brigadas -21 efectivos-, tres motobombas, dos helicópteros y cinco medios aéreos continúan intentando controlar el foco de la parroquia de Atás. Dentro de los fuegos que han conseguido ser controlados figuran los que afectan, en A Coruña, a los concellos de Coristanco, Boqueixón, Santiago de Compostela y Mazaricos. Otro de los incendios de grandes dimensiones, pese a estar bajo control, es el localizado en el concello lucense de Friol, en concreto en la parroquia de Seixón, donde están trabajando dos agentes forestales, nueve brigadas -63-, cinco motobombas, un helicóptero y cuatro medios aéreos. Los restantes dos fuegos dominados por los servicios de extinción afectan a los concellos pontevedreses de Nigrán -Chandebrito- y Tomiño -Goián.