Profesionales de la lucha contra el fuego apuestan por eliminar las brigadas municipales y denuncian amenazas de algunos alcaldes

La Asociación Profesional del Personal de Defensa contra Incendios Forestales (Apropiga) y la Asociación Profesional de Axentes Forestais de Galicia (Aprofoga) apostaron en el Parlamento por la supresión de las brigadas municipales, de forma que los servicios de lucha contra el fuego dependan de un solo departamento. Así lo manifestaron durante su intervención en la Comisión de Estudo de los incendios. El presidente de Apropiga, Ignacio Penela, abogó por la "desaparición das brigadas conveniadas cos concellos de xeito que este persoal se integre na Consellería de Medio Rural". En esta misma dirección se expresó desde Apropiga Guillermo Basteiro, quien afirmó que los profesionales de lucha contra el fuego tienen que ser contratados "por unha soa administración, pola autonómica, porque senón acontece o mesmo que nunha subcontrata". También el presidente de Aprofoga, Miguel García, afirmó que "todo o persoal debería estar baixo o mando de Medio Rural e deberíase suprimir a eventualidade na contratación". Miguel García aseveró que "non pode haber máis brigadas municipais", de forma que el dinero que se destina a su contratación debe dedicarse "á profesionalización" del servicio de lucha contra los incendios forestales. Asimismo, Guillermo Basteiro indicó que en el operativo "hai moita xente organizando á vez que falta man de obra". En su opinión, la solución pasa por "formar á xente que está dentro", aunque también abogó por que el personal se especialice en extinción o en prevención en vez de dedicarse a las dos tareas, "porque senón non somos profesionais de nada", apostilló. Criminalización Las dos organizaciones también denunciaron que se criminalizó a este personal de forma "inxusta" al acusárseles de estar descoordinado o, incluso, de la autoría del fuego. "Atribuir ás brigadas a descoordinación é un despropósito que só se pode esperar dos que queren desviar a atención sobre as responsabilidades", afirmó Penela. Asimismo, Aprofoga denunció que algunos profesionales recibieron amenazas por parte de concellos cuando estaban realizando su trabajo. "Persoalmente non vivín ningunha situación así, pero teño compañeiros que me informaron de que recibiron ameazas por parte de alcaldes, incluso con barras de ferro", aseveró Miguel García. Desde la Asociación de agentes forestales de Galicia no se constata la existencia de una trama incendiaria en la comunidad entre el 4 y el 15 de agosto y se solicita "un castigo penal e patrimonial" para aquellos que se demuestre que son pirómanos. Miguel García también afirmó que las brigadas son especialistas en apagar el fuego en el monte, no en las proximidades de las casas, por lo que considera que en la primera quincena de agosto tenía que funcionar el operativo de Protección Civil, dada la proximidad del fuego a las viviendas. Las asociaciones también señalaron falta de previsión por parte de la Consellería de Medio Rural de cara a la actual campaña de incendios. En este sentido, explicaron que se adelantó la temporada de máximo riesgo al 15 de junio, aunque las contrataciones empezaron el 4 de julio, prolongándose hasta el 26 de agosto. Además, denunciaron la falta de material para realizar su trabajo.