Suárez Canal reconoce que el dispositivo de extinción no estaba diseñado para "una situación excepcional de emergencia"

Admite que hubo "disfunciones" aunque cree que la situación no hubiese variado aunque funcionase al cien por cien

El conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, afirmó que la crisis incendiaria de agosto evidenció que el dispositivo de extinción existente no estaba diseñado para hacer frente a "unha situación de emerxencia na que os incendios se convertiron en problemas de seguridade cidadá e de orde pública". Así lo aseguró durante su comparecencia en la Comisión de Estudo sobre las causas de los incendios celebrada en el Parlamento. Suárez Canal aprovechó su intervención para recordar, al igual que había hecho en ocasiones anteriores, que entre el 4 y el 15 de agosto se produjo en Galicia "unha situación excepcional non previsible" debido a una combinación fatal de causas estructurales y climatológicas, destacando especialmente la sequía. En este sentido reafirmó que la Xunta no adoptó "ningunha decisión política" que tuviera "impacto significativo" en la extinción de incendios. "O que se variaron foi pequenos matices para mellorar a resposta, non para empeorala", aseguró. Así, reiteró que su departamento optó por mantener un dispositivo que "basicamente na estrutura, nos protocolos, nos esquemas de mando, nas brigadas e nos medios era o mesmo que no periodo anterior". El titular de Medio Rural justificó esta decisión política afirmando que los mecanismos de extinción "tiñan unha resposta razonable que nós recoñecemos en varias ocasións" por lo que "non íamos tocar a columna vertebral dese dispositivo". Además, recordó que el buen funcionamiento del dispositivo quedó "perfectamente" bien "agás eses 12 días do mes de agosto". Así, precisó que, si tenemos en cuenta el periodo comprendido desde el 16 de agosto hasta 30 de septiembre, entre los años 2000 y 2005, se quemaron una media de 14.214 hectáreas en Galicia mientras que el número de hectáreas quemadas en el mismo periodo de 2006 es de 4.544 hectáreas, "sobre 10.000 hectáreas menos" -concretó. Suárez Canal también puso de manifiesto que en la crisis incendiaria que vivió la Comunidad gallega este verano, "os incendios pasaron a un segundo plano" frente a la necesidad "de salvar as vidas e os bens dos cidadáns". A este respecto, destacó la "resposta áxil e proporcionada" del Gobierno gallego a la hora de aportar medios técnicos y humanos en una situación "na que os medios nunca son suficientes. El conselleiro subrayó también la colaboración del Ejecutivo central, de otras Administraciones autonómicas y especialmente la de "moitísimos profesionais" que "traballaron ata a extenuación". El titular de Medio Rural reconoció, asimismo, la existencia de "disfuncións de medios e coordinación" en el dispositivo motivadas por el "estrés" de la propia situación. El conselleiro apuntó a la existencia de brigadas que dependen de la Xunta frente a otras que dependen "no traballo diario" de los Concellos lo que pudo ser "unha causa de descoordinación", a pesar "da mellor intención dos alcaldes". No obstante, reconoció que "funcionando ao 100 por cen", el mecanismo existente para la lucha contra incendios "non tería coutado nin modificado significativamente a situación". "Tolerancia cero" Durante su intervención, Alfredo Suárez Canal, pidió "tolerancia cero" con los incendiarios y la persecución "extrema" de los delincuentes que prenden fuego a los montes gallegos "porque están atentando contra o noso medio natural, contra as nosas vidas, propiedades e sobre todo, contra o futuro do noso país". Subrayó la necesidad de una actuación "de choque" en la persecución, vigilancia e involucración total para que exista "dificultade extrema" a la hora de que "os delincuentes queimen o monte". "Esa é a loita fundamental", aseguró y recordó "que a día de hoxe" hay, aproximadamente 1.400 incendios cuyos autores "non están detidos". Además, anunció que se llevará a cabo una profesionalización del dispositivo, no vinculada solo a la defensa contra incendios sino a la creación de mecanismos "cun carácter máis versátil" que pueda llevar a cabo el resto del año "traballos relacionados co monte. "Tamén iremos mellorando os medios e o material rodante paulatinamente", afirmó. También recordó que "por primeira vez actuamos nas consecuencias dos incendios", ya que el Gobierno gallego llevó a cabo una actuación para evitar la erosión posterior a los incendios forestales. "Nalgúns montes hoxe agroman os vexetais que plantamos", precisó. Por otra parte, destacó que se están "sentando as bases" de una nueva política forestal y reiteró que antes de finales de año o a principios de 2007, si no fuera posible antes llevar a cabo los trámites, "terán no Parlamento galego unha Lei de Prevención e Extinción de Incendios Forestais que pretende dar resposta aos problemas coxunturais que vimos, non só na vaga de incendios, senón na máis recente do noso país".