El PP teme que el anuncio de restricciones para construir en el litoral favorezca la especulación mientras no entra en vigor
La Xunta suspenderá los proyectos urbanísticos a menos de 500 metros del mar en municipios que no se han adaptado a la Lei do Solo
Los populares gallegos han advertido a la Xunta de las consecuencias que pueden tener las medidas urgentes anunciadas para frenar el desarrollo urbanístico en el litoral. Tras conocerse el proyecto de ley que contempla la prohibición de construir a menos de 500 metros del mar y la suspensión de los proyectos urbanísticos en la franja litoral en municipios que no tengan su plan adaptado a la Lei do Solo, el PPdeG teme un ?movimiento especulativo? y una ?avalancha? de licencias hasta que las nuevas medidas entren en vigor. Según las previsiones de la Xunta, la nueva normativa podría entrar en vigor en el segundo trimestre del próximo año, lo que deja a los concellos más de siete meses para tramitar centenares de licencias y los propietarios presionarán para construir legalmente donde, dentro de siete meses, será ilegal?. A los populares también les sorprende que la nueva ley no pueda ser aplicada hasta después de las municipales y se preguntan si los concellos socialistas que concedieron licencias indiscriminadamente en los últimos meses tenían información privilegiada sobre la norma anunciada por Política Territorial. La futura Lei de Medidas Urxentes de Ordenación do Territorio e do Litoral de Galicia supondrá la suspensión del desarrollo urbanístico en terrenos ubicados a menos de 500 metros del mar en los municipios que no adaptaron sus planes de urbanismo a la legislación vigente. Esto supondrá que se paralizarán las nuevas actuaciones urbanísticas que se pretendan ejecutar sobre el litoral gallego y que se basen en proyectos obsoletos, pues muchos municipios no están adaptados a la Lei 9/2002 (Lei do Solo). Así se contempla en el anteproyecto de esta ley, que ha sido presentado por la conselleira de Política Territorial, María José Caride. Además, las suspensiones de proyectos no terminan aquí, pues en los municipios con menos de 50.000 habitantes también se reducirá la superficie urbanizable. Esto se debe a que, según Caride, hay zonas contempladas como urbanas a pesar de que no cumplen los requisitos que se exigen en estos casos (tener acceso a todos los servicios, estar en la zona urbana...). Y es que los objetivos principales de esta ley pasan por reducir la presión urbanística en el litoral, crear el Instituto de Estudos do Territorio, prevenir los incendios forestales en zonas próximas a urbanizaciones e integrar procedimientos ambientales y urbanísticos. Según María José Caride, esta ley "ten como obxectivo protexer o noso territorio, lograr que as nosas vilas sexan espazos máis atractivos de vida, de traballo e de ocio e favorecer a productividade das nosas actividades económicas". Esto, además de garantizar la protección de los recursos naturales, pues asegura que hay proyectos en espacios incluidos en la red natura. Otra de las medidas que contempla esta Lei de Medidas Urxentes es la creación del Instituto de Estudos do Territorio, que pretende prestar asistencia y asesoramiento a los municipios para elaborar la gestión, adecuación y ejecución del planeamiento. El Instituto elaborará también estudios sobre el territorio y el urbanismo. Prevenir incendios El cuarto bloque de actuación que abarca esta normativa intentará prevenir los incendios forestales en zonas próximas a urbanizaciones. Para ello, entre las medidas que se pretenden aplicar está el establecimiento de una superficie de servidumbre de 25 metros alrededor del perímetro para aquellas urbanizaciones situadas a menos de 400 metros de terrenos forestales, a excepción de las explotaciones agrícolas y ganaderas. Mantener esta zona libre de vegetación correrá a cargo de los propietarios de las viviendas, que también deberán elaborar un plan de prevención y defensa contra incendios forestales, así como disponer de equipos de extinción homologados.