Vilagarcía se refuerza para recibir un nuevo frente de lluvias
Touriño atribuye las riadas a la intensidad de las lluvias, agravada por un "desorden urbanístico" y por los efectos de los incendios
El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, visitó la ?zona cero? de las riadas de los últimos días, Vilagarcía de Arousa, donde anunció que habrá más medios humanos y materiales para afrontar el nuevo frente de fuertes lluvias de este fin de semana. Touriño presidió la reunión del Operativo de Prevención e Resposta ante las inundaciones y se comprometió a mejorar la ?tranquilidad? de los vecinos con la llegada en las próximas horas de miembros de los Grupos Municipales de Intervención Rápida (Grumires) de otras localidades de Galicia, además de más medios mecánicos para las labores de limpieza. El presidente de la Xunta avanzó que el Gobierno gallego tiene tres líneas de actuación básicas. En primer lugar, la limpieza y retirada de los residuos sólidos acumulados en el lecho del río Con. En segundo lugar, se dispondrán medios para aumentar la capacidad hidráulica de evacuación del río, y en tercer lugar, se adoptarán las medidas para la limpieza de la red de pluviales de manera que alcance su máximo nivel de desagüe. Junto a estas medidas, se procederá al vaciado preventivo y limitado del embalse del río Con para tratar de reducir el nivel alcanzado estos días. El vaciado se realizará sin que se ponga en peligro el abastecimiento de agua a la población, explicó el presidente. Ayudas El presidente gallego también recordó que la próxima semana el Consello de la Xunta aprobará el decreto de ayudas para la reparación de los daños causados por las lluvias del lunes, en la misma línea que los aprobados para las inundaciones del mes de octubre en otros puntos de Galicia. Touriño manifestó su confianza en que pueda adelantarse la tramitación de estas ayudas para "gañar tempo ao tempo e intentar reducir os prazos legais para que os cidadáns poidan beneficiarse" lo antes posible. Horas antes, tras el Consello da Xunta, Touriño señaló que las lluvias intensas caídas en un corto espacio de tiempo es la "causa determinante" de las inundaciones, junto con el "desorden urbanístico" en las zonas afectadas, y la situación de los montes tras los incendios, en último lugar. El Consello de la Xunta estudió un informe que cifra en 16 los concellos que sufrieron "impactos importantes" por las riadas registradas estos últimos días, sobre todo en la provincia de Pontevedra. La Xunta aún no cuenta con una evaluación económica de los daños, pero el presidente gallego dijo que "non dou por boa" la cifra inicial apuntada de 5 millones de euros. Aseguró que "queda por facer" para conocer los daños, ya que ni siquiera hay una cifra de valoración sobre Vilagarcía de Arousa, el concello más afectado. Aparte de esta localidad, el Gobierno gallego constató daños importantes en las comarcas de O Morrazo y O Salnes, y los concellos de Caldas de Reis, Poio, Pontevedra y Vilaboa (en Pontevedra), y en la comarca de O Barbanza, en localidades como Ribeira y A Pobra (en A Coruña). En respuesta a preguntas de los periodistas, Touriño salió al paso de las declaraciones tanto del alcalde de Vilagarcía, sobre un posible retraso e insuficiencia de las ayudas, como del presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijoo. Así explicó que la concesión de las ayudas conlleva un proceso de tramitación "non superior a catro meses" necesario para garantizar su justificación. Manifestó que no cumplir con este procedimiento sería una "irresponsabilidade" y que "esto non é unha distribución de lotería", sino una Administración pública que está tomando medidas "que non tomou ningún Goberno precedente". Por eso, insistió en reclamar a Núñez Feijoo que deje atrás la "demagoxia" y que "abandone a pesca furtiva en aguas revoltas". A su juicio, este no es el momento para "poñerse as botas para gañar votos", sino de trabajar todos unidos para intentar paliar y prevenir los daños ante esta "situación excepcional" a nivel meteorológico. Gota fría Tras destacar que en Vilagarcía se recogieron hasta 153 litros por metro cuadrado, el nivel más alto de los últimos 30 años, Touriño explicó que esta pluviosidad se vio agravada por la subida de temperatura en las aguas de la ría de Arousa. Con hasta tres grados más de lo habitual, esta zona de agua caliente unida al frente frío provocó un efecto "técnicamente non equiparable, pero semellante a unha gota fría".