La Fundación Reveriano Soutullo recupera 18 partituras del músico gallego de las que no quedaban muestras
Las obras se encontraban en el archivo de la antigua Banda Municipal de Vigo
La Fundación Reveriano Soutullo recuperó en los últimos meses un total de 18 partituras del músico gallego de las que se conocía su existencia pero de las que no existían muestras en la actualidad. La presidenta de la fundación y nieta del compositor nacido en Ponteareas, Rosa María Arija Soutullo, explicó en Vigo que las obras se encontraban en el archivo de la antigua Banda Municipal de Vigo, a la que el Concello facilitó el acceso y la investigación en la que también colaboró el Instituto Galego das Artes Escénicas e Musicais (IGAEM). La principal característica de estas partituras es que son manuscritas. Según explicó Arija "debieron ser anotaciones realizadas por los propios músicos que interpretaban las piezas", lo que hace posible que en muchos casos sean inéditas y que a pesar de que se interpretaran a principios del siglo pasado, nunca se hubieran publicado. Se trata de composiciones dirigidas a bandas de música, como pasodobles y mazurcas, y de arreglos de otras composiciones como zarzuelas, para poder ser interpretadas por este tipo de formaciones populares. Algunos de los títulos son el "Himno a Vigo", "Pasodoble de Vigo", "Dolorosa Juanita", dedicado a su primera mujer, "Amores de Aldea" o "Día de Labranza". La presidenta de la Fundación Soutullo explicó que algunas de las obras se presentarán el próximo año con motivo del 75 aniversario de la muerte del autor así como un estudio sobre el importante papel de la mujer como compositora e intérprete musical a principios del siglo XX, en el que una hermana de este también colaboró. Músico gallego Reveriano Soutullo nació en la localidad Pontevedresa de Ponteareas en 1880. Estudió en el Conservatorio Superior de Música de Madrid y vivió una larga temporada en Vigo, donde murió en 1932. A pesar de estar muy vinculado a Galicia en su obra, se distinguen dos épocas, la primera hasta 1851 y 1915, caracterizada por sus composiciones para bandas, a las que se dedicó desde los 15 años, y una segunda hasta 1932 en las que trata otros estilos musicales como la zarzuela. Según su nieta, quedan pocas obras de la primera etapa al perderse tras un incendio en la que fuera casa del músico durante la Guerra Civil. Los hallazgos encontrados en el archivo de la antigua Banda Municipal de Vigo datan de este período y ayudan a entender la evolución del compositor y divulgador. En cuanto al segundo periodo compositivo, existen muestras en los archivos de la Biblioteca Complutense, la Biblioteca Nacional y el Conservatorio Superior de Música, en Madrid.