La CIG demanda a los grupos parlamentarios que anulen la creación de la "Tragsa galega"
Denuncian que sólo servirá para aplicar políticas clientelistas
La empresa de Servizos Agrarios Galegos, creada por la Consellería de Medio Rural para asumir las tareas de prevención y viligancia de los incendios forestales, no es vista con buenos ojos por la Confederación Intersindical Galega (CIG). Así lo manifiestan desde la CIG-Autonómica, que demanda a los grupos parlamentarios que aprueben una proposición para anular la creación de esta empresa. El sindicato nacionalista entiende que esta entidad es "a Tragsa galega", por lo que critica al conselleiro, Alfredo Suárez Canal, por haber pasado tantos años en la oposición denunciando que Agricultura utilizaba a Tragsa para meter a sus amigos, cuando ahora es él el que crea una empresa de similares características. La CIG sostiene que metiendo la gestión de los incendios en manos privadas, Suárez Canal podrá "contratar a quen lle pete", dado que el acceso no está sometido a los principios de mérito, igualdad y capacidad que rige la contratación de personal en la Administración. Por eso, consideran "de escándalo" que la contratación de personal para montes y para realizar funciones en la propia Consellería se realice "polo dedo do señor Suárez Canal". Esta fórmula para designar puestos de trabajo ya ha sido empleada en anteriores ocasiones por este departamento de la Xunta, según la CIG, que sostiene que el jefe de servicio de Reforma das Estruturas, Mariano García Agra, fue nombrado "a dedo", pues es hermano de la delegada de Medio Rural en A Coruña. A su vez, indica la organización sindical, fue contratado el hijo de este para una asistencia técnica en la misma dirección general en la que trabaja su padre. La CIG critica así que "nin o PSOE nin o BNG teñan posto freo a este tipo de irregularidades", que inflan a la Administración Autonómica con contrataciones que luego acaban siendo indefinidas y que están rodeadas de "escurantismo e falta de transparencia". Demandan coherencia Ante esta situación, la organización sindical demanda coherencia al Gobierno bipartito, pues "xa que sempre denunciaron a política do PP de privatización dos servizos públicos", cree que ahora deben renunciar "á creación dunha administración paralela que só serve para alimentar o clientelismo político". Para la CIG es "inxustificable" la aparición de esta empresa, que consideran que sólo servirá para hacer políticas clientelistas y que, además, "esto non foi o que prometeron" ni el BNG ni el PSOE.