La reunión "a tres" para intentar cerrar la reforma estatutaria se celebrará el día 17 en Monte Pío
El BNG se opone a "aparcar" el proceso hasta después de las municipales
La reunión entre los tres líderes políticos para abordar de manera definitiva la reforma del Estatuto de Autonomía de Galicia por fin tiene fecha. La anunciaba el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, tras la reunión de la Executiva de su partido, el PSdeG, y será el próximo miércoles, 17 de enero. El lugar del encuentro es la residencia presidencial de Monte Pío, en Santiago de Compostela, y la hora a partir de las 10,30 horas, con la intención de desarrollar "unha mañá de traballo", según explicó el presidente, confirmando la posibilidad de otras reuniones posteriores, al puntualizar que "xaneiro ten máis días". Pocas cuestiones más aclaró sobre esta esperada cumbre, más allá de reclamar "coraxe política" e "vontade de acordo" a los que serán sus compañeros de tarea, el líder del BNG y vicepresidente de la Xunta, Anxo Quintana, y el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijoo. También dijo que este encuentro será el momento de "coller as rendas" del proceso estatutario de cara al "sprint final" de la reforma. A su juicio, llegó la hora de "ir poñendo negro sobre branco" las propuestas de cada partido y propiciar acercamientos en los temas fundamentales, como son la definición competencial, los aspectos de financiación y la cuestión identitaria. Los principios que deben regir el acuerdo entre los tres partidos son el respeto a la Constitución, conseguir un Estatuto "de primeira" para Galicia y también un texto "de encontro". Por eso, considera que "hai un amplio marxe para o acordo", ya que "non dubido do compromiso de ninguén" en este sentido, aseguró. Recordó que la ponencia parlamentaria ultimará un texto entre el jueves y viernes de esta semana, 11 y 12 de enero, y a partir de ese documento es necesario "propiciar achegamentos". "O tempo necesario" Touriño tampoco quiso determinar cuántas reuniones pueden ser necesarias para conseguir la reforma del Estatuto, sino que se empleará "todo o tempo necesario". Pero esto no supone que el acuerdo quede para después las elecciones municipales, sino que prefiere "esperar" a los resultados de la reunión y "non facer cábalas que a priori poden perxudicar" a la hora de alcanzar un consenso. Esta postura cauta sobre las perspectivas de la reunión fue la que mantuvo a lo largo de toda la rueda de prensa, en la que ni siquiera quiso pronunciarse acerca de la propuesta realizada ayer por Quintana de un "consenso blindado" para la reforma. Dijo que "non é o momento de entrar en propostas previas". Insistió en que "debemos ser capaces de abandonar posturas partidarias" porque es necesario dirigirse no a las bases de cada partido, sino a la sociedad gallega en general, que quiere que Galicia "estea entre as comunidades de primeira". Así, aseveró su "esperanza certa" de encontrar entre todos el camino para llegar a un acuerdo respetando los principios fundamentales del marco constitucional, y el que sea un Estatuto "de máximos" y "de todos". Transformar el país En este nuevo año parlamentario, llegarán al Parlamento un amplio conjunto de medidas legislativas que "transformarán de arriba a abaixo este país", afirmó el presidente gallego. Así aparte de las leyes de protección del litoral, la de Protección da Paisaxe, o la de Incendios, citó la Lei de Publicidade Institucional que cerrará la triada de proyectos para la transparencia política. Por otra parte, tras la primera reunión de la Comisión Executiva Nacional del PSdeG-PSOE en 2007, Touriño se refirió a la polémica surgida en el Parlamento de Galicia por los desacuerdos de BNG y PPdeG con ciertas actitudes de su presidenta, la socialista Dolores Villarino. El titular de la Xunta calificó estos desencuentros de "momentos de tensión, que non de conflictividade" inscritos dentro de la "intensa" actividad parlamentaria registrada durante esta legislatura. Por eso, apostó por mirar este tipo de situaciones "con distancia". También quiso dejar claro que las desavenencias parlamentarias no influyen en la coalición de Gobierno, sino que el bipartito "funciona e aporta estabilidade ao país". Touriño destacó que la actividad parlamentaria con el nuevo Gobierno supuso un control al Ejecutivo "sen precedentes". Además, recordó que los cambios en el reglamento de la Cámara gallega tendrán que realizarse "dende o consenso" y que se trata de una cuestión incluida en el pacto del bipartito, entre PSdeG y BNG.