La imagen tiene mil significados y significantes. Cada ser solo capta unos cuantos. El poder y el Poder es la imagen con infinitos modos de contenidos y continentes. Solo es eso.
Flotar con y en el ojo. ¿Acabará tomando el poder mundial, los poderes de ideologías no democráticas de un color o de otro…? ¿Qué mermen las interpretaciones y evoluciones de los derechos humanos individuales…? ¿Cuánto dinero y cuánto poder debe amasar el poderoso? ¿Cuánto es su máximo? ¿Banderas que limitan el poder de los individuos en la sociedad, no limitan el poder del Poder que ejercer ese poder, siempre una camarilla, siempre termina en uno…?
Hacemos brotar la carne o hacemos brotar la psique-razón o hacemos brotar y crecer el alma-espíritu. O combinamos las tres dimensiones de forma correcta. Tenemos una idea estructural del mundo, a determinada edad, y ya apenas la cambiamos, solo algunos matices según las circunstancias. Se han experimentado mundos hacia dentro y hacia fuera. Se van pegando virtudes y defectos, que surgen desde fuera y desde el interior. No aceptan que defienda la posibilidad del alma inmortal, ni de la inmortalidad humana, ni del juicio particular, ni del Principio de la Divinidad.
No aceptan, nada de todo ello. Por eso, me han cercado y matado para que me muera en una cueva de silencio. Eso es la cultura de hoy. Cierran en una gruta a quienes sienten y perciben diferente, pero siempre en nombre de grandes ideas y de la libertad y de la tolerancia y de la gran moral. Y tú, te vas muriendo callado en la gruta de tu ser.
Tres palmeras. Ser fuertes y ser sanos y triunfar en el mundo y ser feliz. Todo eso, que las personas de buena voluntad desean para si mismas, para los cercanos, y si han alcanzado un grado suficiente de bondad, para toda la humanidad. “Amarás a Dios con todo tu corazón, tu alma, tu mente, amarás al prójimo como a ti mismo, te amarás a ti mismo como Dios quiere que te ames”.
Insertar enormes trozos de metafísica y de espiritualidad y religiosidad en un trozo de literatura y de pintura, sea un género de un color o sea de otro. Sea artículo o poema o relato o pintura o dibujo… Alguien que medio vive y medio sobrevive intenta encerrar el mundo en su cabeza ovalada. Te ha faltado persistencia y perseverancia. Has hollado demasiados caminos-vocaciones y después, en todos te has dado con un muro de diez metros. ¿Y deberías de haber empezado a hacerle pequeños agujeros?
Todos los seres sienten. Puede que no todos sean capaces de materializarlos en fórmulas físicas o psíquicas o morales o artísticas o filosóficas. Pero el más pobre del mundo, en medios y cultura, sabe y sufre y siente los grandes misterios del mundo. Porque los padece en su interior. Puede que jamás realice una frase, puede que nunca los indique. Ese es el drama, que los listos en cultura o en poder o en dinero, infravalorizan al resto de personas y de seres humanos. Esta es siempre la historia, desde que tenemos datos y documentos en teselas o en rollos.
La realidad es tan inmensa y las interpretaciones tan pequeños, y los estilos tan limitados y los géneros y subgéneros tan modestos. Que por eso intentamos ir más allá, no por originalidad o creatividad o vanidad o soberbia, para intentar cristalizar tanto todo como existe, en un pequeño trozo de pensamiento-percepción. ¡Ya que has fracasado en los océanos de la interpretación cultural, ten el valor, sin saltarte la moralidad y la legalidad vigente, de ir más allá, si al final, son botellas huecas con mensajes tirados a las galaxias que nadie besará…!
Un universo propio para dejar huella en el mundo, ser un Mozart en algo, esa es la ambición de casi todos los seres humanos, cada uno es un trozo de realidad. La mía también ha sido, incrustada y materializada en la cultura. Pero ya, después de décadas de sembrar esta tierra, y todo haber sido fracasos, con alguna manzana de un pequeño éxito, sé que mi sombra se apagará pronto. Es lo mejor, así los errores, que serán miles, no irán a otras cabezas y a otros corazones. Pero también es triste, porque el cerrajero merece su salario y su valoración.
Estar en un laberinto. Tantas emociones y pasiones e ideas y conceptos y metas y deseos que luchan dentro cada ser viviente. Toda la vida nadando en esas aguas. Nunca encontrando la isla para vivir en paz y sosiego y verdad y bondad y belleza y con y en el Buen Dios. ¿Debes demostrar a alguien que piensa es de una ideología y tiene un sueño, que en la realidad es de la ideología contraria y del sueño contrario? ¿Debes demostrárselo o argumentarle, o es mejor dejarle con la piel de su cerebro ideológico, y que piense hasta que terminen sus respiraciones que es o piensa o siente de un modo, cuándo en el fondo y en la realidad, en los hechos ordinarios del existir es del contrario, de ese contrario que tanto rencor tiene…?
Dices algo, y ya se hacen una idea mental de ti. Y solo es un algo, existiendo miles y docenas de miles de algos.
jmm caminero