La Xunta cerrará la Vía de O Barbanza entre Dodro y Boiro después de Semana Santa

Las obras de desdoblamiento obligan a desviar el tráfico a través de la carretera AC-305

Un día después de reabrir al tráfico en su totalidad la Vía de O Salnés, Política Territorial anuncia un nuevo cierre, el de la vía de O Barbanza entre Dodro y Boiro para después de Semana Santa. Las obras de desdoblamiento para su conversión en autovía obligarán a cortarla al tráfico a lo largo de los próximos meses en varios tramos. Así lo anunció en Rianxo el director xeral de Obras Públicas, Manuel Morato, y el delegado provincial de la CPTOPT en A Coruña, Jacinto Parga. El primer corte programado será entre el enlace de Dodro y el enlace de Boiro. Afectará a 21 kilómetros y se iniciará después de Semana Santa para finalizar antes de julio y evitar que afecte al turismo. Durante este corte el tráfico será desviado a través de la carretera AC-305, que, según la Xunta, será debidamente acondicionada para soportar la mayor carga de tráfico y señalizada como itinerario alternativo. La Vía de O Barbanza podrá ser utilizada con normalidad en el resto de su trazado entre Boiro y Ribeira, a lo largo de otros 19 kilómetros. Además, los desvíos ya les fueron comunicados a los concellos de la zona para que colaboren en la reordenación de los tráficos. Antes de que se produzca el cierre entre los enlaces de Dodro y Boiro, tras Semana Santa, a partir de esta misma semana habrá interrupciones puntuales del tráfico en la vía para realizar voladuras. Este corte resulta obligado, según Política Territorial, ante la necesidad de afrontar el grueso de los trabajos para construir la autovía, que consisten en la elevación del rasante, la construcción de nuevos viaductos y falsos túneles o la variación del trazado de un gasoducto que actualmente cruza la Vía del Barbanza por el aire y que en la futura autovía irá enterrado. Esta calzada VG-1.1 se desdoblará para convertirse en la Autovía do Barbanza, con la nomenclatura AG-11. Tendrá un total de 40 kilómetros (entre Padrón y Ribeira), con ocho nuevos viaductos y un falso túnel. Un total de 3.800 metros de la nueva autovía se corresponden a siete tramos que discurrirán por un trazado distinto al actual.