Domínguez evita hablar de una posible coalición BNG-PSdeG en Vigo y Caballero la da por hecha si no consigue mayoría

Porro apuesta en Radio Líder por vender logros, y no proyectos faraónicos y Soto se ve como mediador tras los comicios

Los cuatro candidatos que aspiran a la Alcaldía de Vigo pasaron por los micrófonos de Radio Líder para desgranar sus expectativas de cara a las municipales del 27 de mayo. El cabeza de lista del Partido Galeguista, Manoel Soto, es consciente de que pueden ser claves a la hora de formar gobierno. Cree que son necesarios para mediar entre el resto de fuerzas políticas. Y deja caer que su apoyo a otros partidos pasaría por formar parte del gobierno local. Está convencido de que los miembros de su lista están más ?capacitados? para gobernar que otros aspirantes. Como ejemplo pone a Maite Fernández, en sus palabras ?una de las mejores ediles? que ha tenido Vigo. Soto no quiere adelantar a qué partidos estaría dispuesto a dar su apoyo para gobernar. Se limita a asegurar que usará ?el sentido común?. Primero para negociar con los programas de cada partido en la mano, y una vez que se acerquen posturas en este punto, hablarán de quién asume la responsabilidad de cada área. Eso sí, si al final hay acuerdo para entrar en el gobierno local, su meta es entenderse también con el resto de partidos y garantizar la gobernabilidad entre todos. Tampoco el candidato del BNG, Santiago Domínguez, quiere hablar de pactos a priori. Habrá que esperar a conocer los resultados de las urnas, dice, para decidir si se forma coalición con alguna otra fuerza política. Domínguez apuesta por un Vigo en el que mejore la calidad de vida de los vecinos, y se pueda competir con otras grandes ciudades, tanto españolas como internacionales. Pretende que abandere tanto el área metropolitana, como la eurorregión con el norte de Portugal. E insiste en que, a la hora de hacer pactos, habrá que pensar en los intereses de la ciudad olívica. El cabeza de lista del Bloque se muestra especialmente crítico con las visitas de ?figuras? del PSOE y PP. Presidente y vicepresidenta del Gobierno, ministros y Rajoy, entre otros, se dejan caer estos días por Galicia. Denuncia Santiago Domínguez que sólo vienen cuando hay votos en juego, a hacer promesas que luego nunca cumplen. A su juicio, socialistas y populares están convirtiendo las municipales en una reválida entre ellos, sin preocuparse de los problemas de los vigueses. El Bloque, dice Domínguez, no necesita traer a nadie porque es de ?aquí? y conoce los problemas de la gente. En el juego de pactos arriesga más el candidato del PSdeG. Abel Caballero se muestra dispuesto a hacer coalición con el BNG, si no consigue los votos suficientes para gobernar en solitario. Caballero cree que ahora se dan las condiciones para que el pacto PSOE-BNG funcione, cuatro años después de que Ventura Pérez Mariño se hiciese con la alcaldía, gracias al apoyo nacionalista. Un bipartito municipal que acabó como el rosario de la aurora, y convirtiendo a Corina Porro en regidora de Vigo. Ahora, el socialista es optimista porque el modelo bipartito de la Xunta funciona y ambos partidos han aprendido que si los ciudadanos ?mandan? gobernar en coalición hay que hacerlo. Caballero apuesta por un Vigo que sea un referente dentro de Galicia y España. Que consiga, por fin, contar con el tren de alta velocidad, y mejoras en todas las demás infraestructuras. Cree, además, el candidato socialista que la clase política viguesa nunca ha estado a la altura de las circunstancias, para liderar a la ciudad olívica como se merece, dándole valor y uniéndola. Es crítico además con el gobierno de Porro, al que acusa de no contar en su haber con logros para la ciudad. Algo con lo que no está de acuerdo la actual alcaldesa, Corina Porro, quien defiende que ha trabajado por la ciudad desde el primer día que tomó posesión. Confiesa Porro que no le gustan demasiado las campañas electorales, ya que son muchos los que apuestan por sacar trapos sucios, y prometer proyectos faraónicos. Ella es partidaria de juzgar a los políticos por su trabajo diario, y no sólo por lo que prometen en 15 días de campaña. Son muchas las encuestas que dan a la alcaldesa popular por ganadora. Según ella, no le obsesionan demasiado esos datos, que no dejan claro si podría gobernar, o no, en solitario. Lo que sí tiene claro Corina Porro es que Vigo necesita un gobierno estable. Si reúne mayoría absoluta, mantiene, que seguirá trabajando buscando puntos de diálogo.