EFE | "Abran los ojos y los oídos, hay muchos indicadores de que se produce
violencia y para evitarla necesitamos que se nos escuche, en particular a
los niños y niñas", es el grito de las madres que han perdido a un hijo
como consecuencia de la violencia machista y que este 25N piden a las
instituciones que no vuelvan a fallar.
Ángela González Carreño e Itziar Prats, son madres de tres niñas
asesinadas por violencia vicaria -sus padres las mataron como forma de
castigar a sus exmujeres- y simbolizan la violencia machista "más cruel y
cobarde", en palabras de la delegada del Gobierno contra la violencia
de género, Victoria Rosell.
Por eso, este 25 de noviembre, Día Internacional para la
Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el Ministerio de
Igualdad ha querido reconocer a todas las madres que han perdido a un
hijo como consecuencia de la violencia machista.
Ángela e Itziar suponen "dos historias de resiliencia y de
exigencia al Estado que no las protegió". "Es demasiado tarde para sus
hijas, pero no para otros niños y niñas que a día de hoy conviven o
tienen visitas de su agresor", ha señalado Rosell en el acto
institucional del 25N.
"Abran los ojos y los oídos, hay muchos indicadores de que se
produce violencia y para evitarla necesitamos que se nos escuche, en
particular a los niños y niñas que son a los que menos se respeta", ha
reclamado Prats en la entrega de reconocimientos.
Ella, cuyas hijas de 6 y 2 años fueron asesinadas en 2018 por su
expareja en Castellón meses después de que ésta lo denunciara tras
recibir amenazas, ha interpuesto dos reclamaciones ante el Ministerio de
Justicia y de Interior que aún no han sido resueltas.
"Hasta cuándo el Gobierno y la administración nos van a seguir ignorando y perpetuando sus errores", ha lamentado.
Ángela González ha denunciado por su parte que siguen fallando
las instituciones que tienen la obligación de proteger a los más
vulnerables "nuestros hijos". "Las madres luchamos por estos derechos
intentando transmitir la necesidad de que se les escuche", ha señalado.
Ellos -los niños- "viven entre dos mundos, el de la obligación
aunque les suponga un horror enviándoles hacia un padre maltratador que
les manipula, confunde, agrede y miente y les hace estar en un estado de
ansiedad y terror constante, y el de su bienestar y paz en el que se
encuentran protegidos, cuidados, queridos y en libertad, con su madre".
"Por cada hijo que nos asesinan hay dos víctimas, ha relatado
González; una a la que le arrancan su corta y desprotegida vida y otra a
la que van matando lentamente sufriendo la indignación de haber luchado
contra todas las instituciones y vías legales por la protección de la
vida de un hijo y haber pasado invisibles y ignoradas por todos ellos",
ha denunciado.
La hija de González Carreño, de 7 años, fue asesinada por su
exmarido -condenado por maltrato- durante un régimen de visitas sin
supervisión y que había sido autorizado por un juez.
El Ministerio de Igualdad ha otorgado también un reconocimiento
al pensamiento feminista en las figuras de Rosa Cobo, el de toda una
vida de activismo para Justa Montero y el de compromiso vital por la
igualdad para Carla Antonelli.
Carla Delgado Gómez (Carla Antonelli) ha agradecido el
reconocimiento "para las últimas de la fila, para las mujeres de los
márgenes y de los suelos pegajosos, para las que se curaron de los
puñetazos y las que no vivieron para contarlo".
Ha denunciado el desprecio y el maltrato que sufren las mujeres
por el mero hecho de serlo, y "el hedor del machismo y todas sus
violencias". "Por eso me he alistado a cuantas luchas me ha sido
posible, para hacerle frente y poner mis mejillas en la lucha más digna
de todas, el feminismo incluyente donde cabemos todas".
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha clausurado el acto
visiblemente emocionada y ha recordado a las mujeres asesinadas "con las
que tenemos una deuda pendiente por no haber llegado a tiempo".
"Sabemos que llegamos tarde, que seguimos llegando tarde y que las
cifras son terribles en nuestro país", ha reconocido.
Ha lamentado que todavía hay mujeres que no confían en las
instituciones, un reto pendiente que asume con el objetivo de que
ninguna mujer se sienta sola.
El Gobierno ha homenajeado también a las operadoras del 016 por
su destacable trabajo durante el estado de alarma; al director Andrés
Lima, por su obra "Prostitución"; a la activista Pamela Palenciano, la
periodista Cristina Fallarás, la periodista Ana Bernal, el trabajo de
investigación de la Organización Internacional Women"s Link, la
respuesta institucional del Instituto Canario de Igualdad y el Proyecto
Ödos de Montilla (Córdoba).
Además, se ha celebrado un minuto de silencio a las puertas del
Ministerio de Igualdad en homenaje a todas las víctimas de violencias
machistas.