REDACCIÓN | A medida que las rutinas y vidas dependen cada vez más de la tecnología, tener un contrato telefónico que cubra de verdad la demanda de cada persona se ha convertido en una necesidad.
Sin embargo, con tantos proveedores y paquetes disponibles, encontrar el que mejor se adapte puede resultar abrumador. “Al comprender las necesidades reales, llega el momento de comparar y analizar las opciones disponibles y negociar y ajustar el contrato. Esto, que es un embrollo, con un gestor de telefonía es mucho más sencillo porque hace un estudio de mercado intenso y propone lo que de verdad interesa, ocupándose incluso del cambio” comentan desde Anoba, una de las principales start ups que realizan este servicio en España.
Antes de contratar un contrato telefónico, es fundamental comprender las necesidades personales a fondo. Esto incluye identificar la frecuencia y duración de las llamadas telefónicas, estimar la cantidad de datos y mensajes de texto necesarios y considerar la cobertura y la calidad de la red en el área, así como la necesidad de conectar otros dispositivos del teléfono móvil.
Por ejemplo, si es habitual realizar llamadas internacionales con frecuencia, es importante elegir un paquete que ofrezca tarifas internacionales asequibles. De manera similar, si se utilizan una gran cantidad de datos para la transmisión, se debe elegir un paquete que ofrezca una asignación de datos alta o ilimitada.
Una vez que se han identificado las necesidades reales, el siguiente paso que realizará el agente es investigar y comparar las opciones disponibles dentro de los diferentes proveedores y sus paquetes, comparar los precios y características de cada paquete y analizar los términos y condiciones del contrato, incluidas las tarifas y sanciones ocultas.
“Algunos proveedores ofrecen descuentos por servicios combinados, mientras que otros ofrecen planes de datos ilimitados. Al comparar y analizar las opciones disponibles, puede elegir el paquete que ofrezca la mejor relación calidad-precio teniendo en cuenta las preferencias de cada caso” explican.
Seguir de cerca la facturación
Incluso después de firmar con una compañía, es importante controlar periódicamente el uso y revisar las facturas para evitar cargos adicionales. Es la única forma de ver que existe, por ejemplo, una demanda más elevada de asignación de datos, lo que conllevaría reajustar el paquete o actualizar a una asignación de datos más alta.
Navegar por los contratos telefónicos puede ser abrumador, pero dejarse asesorar por expertos y ser capaz de, de forma consciente, comprender las necesidades personales, permite encontrar un contrato que satisfaga las necesidades y el presupuesto más barato. A medida que la tecnología continúa evolucionando, es importante revisar y ajustar periódicamente los contratos telefónicos para garantizar que sigan satisfaciendo las necesidades personales.