El presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijoo, reclamó a la Xunta que "dé marcha atrás" en el Decreto do Galego no Ensino, que aprobó el pasado jueves y que fue rechazado por el grupo de la oposición. Feijoo insta a socialistas y nacionalista a que "volvan ao consenso", de lo contrario "miraremos dende o punto de vista xurídico que facer", advirtió, porque considera que esta nueva normativa "vulnera o Plan de Normalización Lingüística". Así, Feijoo asegura que, al no seguir las recomendaciones realizadas por el Consello Consultivo sobre el texto inicial, "nos metemos nun suposto de posible ilegalidade", porque no se establecen suficientes garantías de equilibrio entre el gallego y el castellano en la educación. En una rueda de prensa ofrecida tras la reunión del grupo parlamentario, Feijoo insistió en que desde su partido "imos manternos no consenso" que supuso la aprobación por unanimidad del Plan de Normalización en 2004 y que "serán outros os que o rompan". A su juicio, aparte de no respetar las recomendaciones del Consello Consultivo, el Decreto supone "unha interpretación restrictiva e interesada" del acuerdo sobre normalización de hace tres años y se está utilizando "para impoñer ideoloxías". Por eso, Feijoo hizo un llamamiento a la Consellería de Educación para que retire este decreto en el que establece que se impartirán como mínimo un 50% de las materias en gallego, y apostó por el "bilingüismo harmónico" que considera que existe en Galicia entre la lengua gallega y el castellano y por no romper "este consenso de 25 anos". Además, el líder del PP gallego insistió en que el Decreto do Galego no Ensino, que calificó de "unilateral", por parte el Gobierno "non garante o equilibrio nin a proporcinalidade no uso das dúas linguas" y sólo conseguirá "provocar rexeitamento" hacia el gallego. El PPdeG seguirá "defendendo o dereito de coñecer as dúas linguas e a liberdade de utilizalas" porque tiene "unha prioridade distinta" a la de la Xunta, ya que no necesita "manter ningún Goberno", explicó, sino sólo defender los derechos de los padres, para que puedan escoger la lengua vehicular en la que deben aprender sus hijos, y de los alumnos, para decidir el idioma para dirigirse al profesor o realizar los exámenes. ?Imposición? del gallego Feijoo advirtió de que ya hubo una época en que desde el Estado "se nos impoñía unha soa lingua e non imos a volver as andadas" porque "o único que se consigue coas imposicións e crear rexeitamento". Pese a esta imposición considera que "por suposto" que estaba reconocido el derecho de los padres a educar a sus hijos en gallego y en este sentido, "remítome as actas da inspección educativa", afirmó. Añadió que al PPdeG no hace falta decirle que hay que proteger el gallego porque "temos máis galegofalantes que calquera outro partido en Galicia" y es una lengua que "mamamos e a seguiremos usando cando nos pete, non cando nos obliguen". Desde el PP "temos a absoluta certeza" de que este Decreto "vai a perxudicar o coñecemento do galego" porque "as linguas non se impoñen", aseveró. Sobre la negociación llevada a cabo entre los tres grupos parlamentarios y el Gobierno, desde el consenso alcanzado en el mes de febrero, Feijoo reconoció que ese primer borrador de Decreto ya no respetaba el Plan de Normalización Lingüística, pese a lo cual fue apoyado por su partido. Además, lamentó que el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, anunciase el rechazo del PP al texto final el pasado jueves "antes de que o estudiaramos", lo que a su juicio significa que "xa sabía que non iba a recoñecer os dereitos dos alumnos".